Tres años después...
— ¡Vamos por mamá chicas! —Barbie empujo la puerta del despacho y entro con una sonrisa, sosteniendo a su hija subida a sus hombros
—Ma. —Faith señalo a su madre sonriendo.
— ¡Mamá vente a la piscina! —Emma entro corriendo y mojando la alfombra con las gotas que salpicaba su bañador
— ¡Si mamá ven! —Sasha se paró en la puerta sosteniendo la gran colchoneta que Barbie le había comprado esa mañana.
— ¡Vamos a jugar! —Hayley miraba a sus hermanas molesto, se cruzó de brazos y miro a su madre haciendo un puchero
— ¡Emma, mira como estas dejando la alfombra! —Gloria retiro su silla y camino hacia su hija.
— ¿Vas a venir a la piscina con nosotras? —Ella sonrío ilusionada.
—Está bien, en cuanto termine. —Gloria asintió y las niñas salieron corriendo de la habitación—. Y tú. —Señalo a su esposa y camino hacia ella sonriendo—. ¿No deberías controlarlas en vez de agitarlos? —apoyo la manos en su pecho descubierto, ya que traía un top y rozo sus labios en un tierno beso
— ¡Ma! —Faith se lanzó hacia delante, siendo sostenida por los brazos de su madre, evitando así que cayera.
—Ven cariño. —Gloria extendió los brazos y agarro a su pequeña—. Mi princesa que ya es toda una mujercita.
— ¿Por qué no dejas ya el trabajo y salimos? —Barbie pasó el brazo por la cintura de ella y sonrío.
—En cuanto acabe con esto salgo. —Gloria sonrío—. Aun no llego Raquelle ¿Verdad?
Y sonó el timbre, ambas se miraron y sonrieron. Barbie salió de la sala para dirigirse a la puerta principal de la casa y Gloria se santo tras su escritorio colocando a su hija en su pierna.
— ¡Qué calor! —Raquelle entro al despacho abanicándose.
—No sé cuántas veces repite eso al día. —Ken entro suspirando tras ella y Barbie le dio una palmada en la espalda riendo.
— ¡Dios es imposible hacer nada con esta panza! —Raquelle se sento en la silla frente a Gloria, no sin mucho trabajo—. De verdad que no comprendo cómo has podido aguantar cuatro embarazos.
—Después lo compensa. —Gloria sonrío a su hermana.
—Me muero por una manzana. —Raquelle miro a su novio—. ¡Búscame una en la cocina Ken!
—Y ahí va el perro obediente. —Ken hizo una mueca y camino hacia la puerta—. Me equivoque de hermana.
— ¡Te he oído! —Raquelle echo una mirada hacia la puerta envenenada.
—Déjalo respirar un poco. —Barbie la miro de reojo.
—Aquí la única que no puede respirar soy yo. —Raquelle señalo su barriga—. Que ganas de que este niño salga ya.
—Pues cuando empiece a llorar por las noches, le salgan los dientes, empiecen a andar y destrocen la casa, se enfermen. —Barbie enumeraba contando con los dedos—. Desearas volver a tenerlo dentro.
—Ay Dios. —Raquelle apoyo la espalda en el respaldo de la silla.
—Deja ya de asustarla Barbie. —Gloria miro a su mujer con el ceño fruncido
—Una manzana para mi reina. —Ken entro por la puerta y acerco la manzana a su novia.
—Me muero de hambre. —Raquelle la tomo y pego un gran bocado.
—Creo que yo me voy a la piscina antes de que me pida algo más. —guiño un ojo a Gloria y salió corriendo de allí.
—Yo voy a vigilarlos. —Barbie sonrío—. Ya son demasiados niñas en la piscina.
—Al fin solas. —Raquelle miro hacia la puerta y se incorporó hacia delante—. Tengo algo que contarte.
— ¿Y qué es? —Gloria negó con la cabeza mientras acomodaba a su hija sobre sus piernas, mientras la niña agitaba el lápiz que había cogido.
—Supe que Ryan esta en Costa Rica. —Raquelle miro a su hermana a los ojos—. Y piensa quedarse allí por largo tiempo.
—Pues bien por él. —A Gloria le importo poco la información.
Después del incidente, el había salido de la cárcel a cambio de firmar el divorcio exprés y cumplir una orden de alejamiento hacia ella y las niñas, por un año. Lo bueno había sido que pasado el año ya no habían vuelto a saber nada de él. Josette seguía teniendo contacto con ella y le había contado que su hermano no tenía intención de buscarla ni a ella, ni a las niñas, cosa que la alivio demasiado.
Habían pasado ya más de tres años. Tres maravillosos años en los que Gloria había vivido feliz junto con su esposa y sus hijas. Había triunfado como escritora y publicado dos libros más, además de seguir con su artículo habitual y algún artículo especial. Hacía mucha publicidad, programas en la tele y en la radio. Se había convertido en un auténtico icono para la mujer.
—Pues que le vaya bien. —Gloria se levantó de su lugar cargando a su hija—. ¿Por qué no te reúnes en el jardín con los demás? Voy a guardar los papeles y me uno a ustedes.
—Claro. —Raquelle se incorporó y tendió las manos a su sobrina—. Vente conmigo preciosa, dejemos a tu mami acabar.
La niña se lanzó a los brazos de su tía y ambas desaparecieron por la puerta mientras Gloria las observaba sonriendo. Ordeno los papeles que había sobre la mesa y abrió el cajón de la derecha para guardarlos, entonces sus ojos se fijaron en lo que había dentro. Dejo los papeles sobre la mesa y tomo el libro, su primer libro, acaricio la portada sonriendo, abrió la primera página y vio aquella frase.
¿Quieres casarte conmigo?
Paso las paginas despacio y finalmente abrió el libro por la última página.
Solo cuando me supe valorar cambio mi vida.
Ahora soy una mujer segura y amada.
Y bajo aquellas últimas palabras que había escrito en el libro, la respuesta a la pregunta que cambio su vida.
Sonrió y cerró el libro, lo dejo en el cajón y guardo los papeles, después lo cerró. Tomo el otro libro que había sobre la mesa, el segundo que había publicado y miro la fotografía que había en su mesa, ella con su familia. Dejo el libro junto a ella y salió de la sala para reunirse con los demás. Para sonreír y ser feliz.
Y allí, en el silencio del despacho, en la mesa vacía solo quedaron dos cosas.
La foto de su felicidad y su segundo libro, que dedico a las cinco personas más importantes de su vida.
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Una novia para mama ADAPTACION.
Fanfiction- ¡Pues vete al carajo! ¡Maldito cabron, egocéntrico, hijo de puta! -Allí estaba gritando en mitad de un parque lleno de niños-. ¡Que disfrutes de mi cama con tu zorra oxigenada! ¡Ojala te pegue una enfermedad venérea! Dos años de noviazgo, seis año...