04. orgullo y prejuicio

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La tradición de la noche de películas cada domingo en casa de Dustin nació hace un año, pocos meses después de que Will se acercara a Dustin, Max y Lucas. Usualmente el filme a ver es decidido mediante piedra, papel y tijeras. Will gana la mayoría de las veces, lo cuál causa un mínimo fastidio por parte de los demás, pero profundamente disfrutan cualquier película que Will escoja. Como la mayor parte del tiempo, la victoria en piedra papel o tijeras el día de hoy la obtuvo Will. Max comienza a sospechar que está haciendo trampa, pero Will lo niega, riéndo.

-Los Juegos Del Hambre- lee Will, en voz alta. El televisor de la sala de estar en casa de Dustin es increíblemente grande, fue un regalo por parte de su madre quien sabía lo mucho que Dustin querría jugar videojuegos en él. -No recuerdo la última vez que la vimos.

-Yo sí - dice Max, acomodándose en el sofá beige, junto a Will. Una de sus manos sostiene un bowl lleno de palomitas de maíz, la otra una lata de Sprite. Will arruga la nariz al notar la extraña combinación. -Algo diferente, por favor.

-Okay. - Presiona nuevamente los botones del control remoto, con sus ojos desplazándose entre la pantalla. Titanic sería una buena opción, si Will tuviese ganas de hundirse en un sofá durante cuatro horas y estar al borde de quedarse dormido, cosa que Lucas siempre le reprocha cuando sucede. Cualquier película de Marvel ni siquiera es opción. Will las odia.

-¿American psycho?- ofrece Lucas, señalando la pantalla con el dedo índice mientras toma asiento junto a la pelirroja. Su brazo se desliza encima de los hombros de ella, abrazándola.

-No gracias. - Will niega con la cabeza.

-Se supone que Will es quien tiene que elegir- ya que el sofá está lleno con Lucas, Max y Will, alguien siempre debe sentarse en el suelo. Esta vez le toca a Dustin .

-¡Orgullo y prejuicio!

Max parece considerarlo durante un breve momento antes de hundirse de hombros.

-Supongo que está bien- dice, sonriendo.

Dustin ofrece apagar las luces, lo cuál tiene poco sentido porque es de día e igualmente la luz solar entraría a la casa por las ventanas. Aparece la primera escena en la pantalla frente a Will, y eso hace que se dé cuenta de que probablemente, en algún momento de su época asocial durante la cual no tenía ni un solo amigo y lo único que hacía era ver tres películas por día (las mismas tres, la mayoría del tiempo), la película quedó grabada en su mente. Y no en sentido figurado. Durante cada escena, Will sabe cuál será la próxima y, básicamente puede predecir cada diálogo de los personajes. Así de patético fue un punto en su vida.

Luego de la película, durante la cual Will se mantuvo extrañamente silencioso (no dijo ningún dato sobre Keira Knightley en las dos horas y siete minutos que dura la película) Dustin ofrece que vayan a su habitación. De ese modo, Max está en la cama de Dustin mirando al techo a la izquierda de Will, quien está leyendo un artículo de Wikipedia sobre Jane Austen. Lucas recorre con la mirada el estante de cómics que tiene Dustin en su habitación, mientras este último relata la trama de cada cómic brevemente, en caso de que Lucas quisiera leer uno.

-A veces desearía haber nacido en el siglo diecinueve - dice Will, recostado con una mano en su nuca. Los demás se giran para mirarlo.

-Nos asesinarían a todos- ríe Lucas. Su risa se mezcla con la playlist de Dustin de fondo, la cual contiene en su mayoría Rock de los 80s. -Yo soy negro. Tú eres gay y Max es pelirroja. Dustin es el único que se salva.

-Fuera de broma- Max interviene. -Me pregunto como sería vivir en esa época. La vestimenta, la gente, los bailes.

Lucas alza las cejas, herido. El baile de regreso a clases es a finales de octubre, y Lucas ha insistido cada día que Max lo acompañe. Desde la vuelta a clases, la cuál fue hace solamente una semana, Lucas ha navegado en un sinfin de métodos de invitaciones al baile. Desde un simple "¿Quieres ir al baile conmigo?" hasta interrumpir su almuerzo en la cafetería, y bailar hip-hop en frente de toda la escuela sosteniendo un cartel de un metro que la invita a ser su cita para el baile.

love to hate you - bylerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora