Caras vemos, planes no sabemos

Amigo nuestro

Hicieron todo lo que pudieron con tal de salvarlo pero lo terminaron empeorando más, el monitor iba cada vez más rápido por la presión, los Autobots empezaron a perder la paciencia por cada grito que Ratchet emitía, uno más fuerte que el anterior y así hasta dar un espasmo más fuerte. Por si no fuera poco Prowl colocó sus servos sobre las placas de su chispa cuando sintió algo fuera de lo común. Le pidió a Sari usar su llave no con el fin de curarlo, sino saber qué sucede adentro, con gusto la niña obedeció, pero al momento de mirar hacia abajo casi se cae, al menos Jetstorm la atrapó.

Lo que estuvo adentro aterró a todos: Todo el tiempo Ratchet estuvo siendo atormentado por un veneno parasitario, que al parecer se estuvo alimentando de su chispa poco a poco; rápidamente Jetfire con la varilla que encontró tomó al ya formado parásito para colocarlo en un frasco de muestras que trajo Isaac cuando fue llamado. Dentro se veía como esa viscosa sustancia exploraba el pequeño espacio circular, comiéndose algunos suministros que no funcionaron para salvar al médico.

—¡Esto es atroz!— exclamó Sari muy perturbada —¡Íbamos a perder a Ratchet por un gusanito mortal!

El profesor Sumdac tomó el frasco para analizarlo, luego se dirigió a Ultra Magnus:

—¿Saben qué es realmente?

—No sabría decirte, amigo humano, pero sí es posible, reconozco que nunca lo he visto

—Será una especie de... ¿Bicho líquido?— la niña cuestionó

—Puede ser— Isaac bajó con cuidado de no dejarlo caer —Tal vez por ahora sí pueda ayudarlos, analizando esta especie para saber qué es, cuando termine traeré mis conclusiones con gusto

—De acuerdo— Magnus agradece —También permita que lo lleve, no queremos que los humanos se aterren también

Sumdac aceptó.

Entonces, cuando Megatron contó la maravillosa noticia también entendió que a los demás se les olvidó haberla escucharla desde un principio, bueno, es válido, pues estando realizando sus crímenes en Detroit y que nadie responda le dio sentido. Además, cuando podían llegan a dar información del próximo movimiento de los Autobots, lo que sí les pareció raro y triste es el hecho de intentar ayudar a Ratchet, algo que ya Megatron sabía desde el comienzo pero que también derrumbó por dentro a Optimus.

Claro, nadie lo sabe todavía, ni siquiera Sentinel, ¿Cómo? Quién sabe, pero Ratchet empezó a presenciar en su chispa todo lo que siente Optimus; desde la tristeza hasta la alegría. De repente sintió sus lágrimas salir de sus ópticos, significa que logró sentir el dolor del joven al recordar su situación. Por un momento logró mencionar su nombre aunque sea susurrando, que al parecer fue escuchado por los gemelos Jet.

—¿Qué sucede? ¿Qué pasa?— cuestionó Jetstorm algo preocupado

—Muchacho...

—¡Ratchet!— Bee exclamó —¡Lo que sea que quieras decirnos es el momento!

Chilló, sujetando su servo.

—Optimus... no... llores...

—¿Optimus? ¿Cómo sabes qué está sintiendo? ¿Qué más puedes decirnos?

De repente volvió a tener espasmos, esta vez más agresivos. ¿Pero cómo era posible si ya no tenía el parásito? En este caso, ahora Optimus estaba asustado, tanto así para que Ratchet lo exclamara con quejidos y jadeos, pidiéndole ayuda a su equipo. Pero lo que sucedió fue más confuso, ahora el joven estaba discutiendo, tanto así para que Ratchet se sacudiera, sabiendo que así empeoraría más la grieta en su casco.

De un lado Prowl intentó tranquilizarlo, mientras que del otro fue Blitzwing con Optimus, intentando detener la discusión de la que tanto se preocupaba, no entendió cómo llegó a suceder; al principio todo era alegría y colores, felicidad, encanto, armonía, y ahora es sólo ira, desesperación, estrés, falta de esperanza. ¿Pero por qué le ocurriría tal cosa al pobre Prime? ¿O es porque no soporta la situación de Ratchet? ¿Tanto para correr a auxiliarlo y abandonar a su familia? Quién sabe.