Vi lo serio que se puso poniéndose solamente en una postura tan firme. Quedándose después sin decir ni una sola palabra más. Pude notar lo nervioso que se había puesto ante mi pregunta así que no dije nada más, solo estaba esperando a que me respondiera no creo que el sería capaz de dejarme con la palabra en la boca o si.
Así que volviendo a mirarme decidió al fin responderme.
—¡Noo!, —dice tan seriamente —pero dime acaso vienes con alguien más.
—Eh...no —dije un poco nerviosa y trabandose las palabras de mis labios
Que rayos me estaba pasando, porque ese chico me ponía tan nerviosa, haciendo que las palabras simplemente se trabaran de mi boca. Nunca en mi vida había cruzado media palabra con un completo extraño como lo estaba teniendo con ese chico tan misterioso y de unos ojos tan divinos como dos diamantes preciosos en la oscuridad. Así que ni siquiera sabía de dónde había aparecido.
—Mmm me lo imaginé —respondió el
Pues para averselo imaginado como el decía el, lo había imaginado muy bien. No creía en absoluto nada de sus palabras, el sabía perfectamente muy bien mis pasos y movimientos que daba. Es como si me estuviera observando y siguiendo y no entendía el porque hacía eso. Simplemente no quise preguntar, pero sea lo que sea lo iba averiguar.
Sonrió no diciendo nada más solo quedándome tan seria y pensativa a lo que el habla dicho.
—Soy Lian —dijo presentándose de una forma tan caballerosa y acercándose tan junto a mi, no dejando de mirarme.
Su mirada solamente estaba tan fija en mi y eso hacía que me pusiera más nerviosa de lo que ya estaba, haciendo que los latidos de mi corazón latieran con fuerza.
—Soy Ariana —dije no dejando de mirarlo también
Mi mirada y la de el se cruzaban como dos imanes, me tenía en ese instante ante sus pies. Oliendo un aroma a loción tan suave y rico, que se que al instante podía volver loca a cualquier chica.
Hice la mirada aun lado, algo sonrojada y me alegue un poco de el, miraba lo callado que se había puesto.
—Bueno creo que ya me tengo que ir, veo que ya se está haciendo algo tarde y no me gustaría llegar muy tarde a mi casa así que nos vemos —dije sonriendo y dando la media vuelta dando unos pequeños pasos.
Pero inmediatamente escuché su voz diciéndome.
—¡Alto! —dijo con un tono algo serio
Ay será que ahora ya no me iba a dejar ir por lo que veo creo que no era algo fácil querer escapar de el. Cerré los ojos haciendo un pequeño gesto y después volví abrirlos volteando a mirarlo.
—Mmm, que pasa —pregunte tan pensativa
—Si gustas yo te puedo acompañar asta tu casa —dijo sonriendo
Di un suspiro de alivio por un momento pensé y creí que el no me iba a dejar ir de vuelta a mi casa que me iba a convertir en su esclava de por vida.
—No gracias — dije un poco seria —no es que no quiera que me acompañes pero prefiero irme sola.
—Mmm como gustes —respondió lian aceptando de que no me acompañará
Le sonreí y di la media vuelta dando algunos pasos, lo cual me detuve un instante volteando de vuelta. Mirando tan sorprendida que el ya no estaba, así que me alegue enseguida.
Llegué después de algunos minutos a la casa de mi abuela, entre y cerré inmediatamente la puerta, fuí a la cocina y me servi un poco de agua en un vaso para llevarme a mi habitación. Lo cual cuando ya me iba a retirar, escuche un ruido tan extraño y algo fuerte en el jardín de la casa. Deje el vaso en la mesa, llendo hacia la puerta y abriéndola enseguida lo cual salí y comencé a mirar hacia todos los lados, pero no miraba absolutamente a nadie me imaginaba que debió de aver sido un conejo que paso por los arbustos.
Lo cual vi inmediatamente una sombra justo parada detrás de mi, volteé y grite enseguida......
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Nuestro Secreto
RomanceAriana vive desde muy pequeña con su abuela en Londres donde conoce a Lian un atractivo y misterioso chico del que se enamora y quien ambos esconden un oscuro y grande secreto.Los dos son lobos, a medida que Ariana descubre el mundo de Lian comienza...