CAPÍTULO IX. ESO DEBIÓ DOLER

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"Todo se derrumba con el toque de la punta de mis dedos"

- Pase lo que pase hoy – animé a las chicas que se habían reunido – ya somos ganadoras y estoy muy orgullosa de todas ustedes. Disfruten el partido, déjenlo todo en la cancha - jugábamos de visitantes, es decir, en el campo del otro equipo.

Las chicas estaban animadas pero nerviosas y pronto comenzamos a ver porque es que nadie quería jugar con este equipo.

- La capitana es la chica rara de la escuela ¿no les da pena? – sostuvo de manera despectiva una de las jugadora del otro equipo refiriéndose a mí.

- Cuida tu boca imbécil – expresó Momo

- Tranquilas chicas, vamos al campo ya. No caigan en provocaciones – pero vino otra y me tropezó con su hombro generando dolor en uno de mis pechos. – controla a tu equipo capitana – le dije a mi contraparte, las calmó y se las llevó.

El juego inició, pero no sin antes ver a Jennie que se lucía bastante molesta junto a Somi, supongo que escuchó y vio lo que había pasado, solo le lance un beso al aire y ella hizo que lo agarró y dibujó un corazón en el aire.

En los primeros cinco minutos ya nos habían hecho tres faltas, incluso a Jisoo que el portero casi nunca sufre faltas y eso les ocasionó una tarjeta amarilla. Momo hizo un gol en la primera mitad, lo festejamos pero ellas insistían en que era posición adelantada, el árbitro cantó el gol. Eso generó más choques dentro de la cancha, había una en particular que la tenía contra mí.

- Maldita sea – caí de rodillas en el césped – maldita sea. – Momo llegó corriendo

- ¿Qué pasó? - su tono era preocupado, ella sabía que yo no era de tirarme para buscar faltas.

- La muy maldita me dio con el taco en mis partes – el dolor era increíble – maldita sea Momo, quítame la marca de esa perra de encima - estaba muy enojada y adolorida.

- ¿Te puedes parar?

- Sí. Santo Cristo, duele muchísimo. – apreté los labios para no llorar.

Menos mal no faltaba mucho para que se acabara el primer tiempo y pudimos salir de la cancha. Lo primero que hice fue buscar hielo y ponerlos en mis partes.

- ¿Estás bien capi? – preguntó Jisoo un poco preocupada

- Duele como la mierda

- Creo que todo fue intencional – dijo Chaeyoung

- También lo creo, ha estado sobre ti en todo el juego – sostuvo Momo - creo que está más interesada en golpearte que en el partido.

- Honey ¿Estás bien? – preguntó Jennie sorprendiéndome por detrás.

- Cariño, no era necesario que vinieras. Estoy bien – le dije dándole una leve sonrisa.

- No lo estás ¿te duele? – asentí

- Pero ya está pasando. ¿Te veo después del partido? Recuerda que iremos a cenar – le pediría a Jennie que fuera mi novia en nuestra cena. Quería hacerlo oficial a los ojos de todos, incluso tenía el anillo.

- Por supuesto Lili. – me besó en la mejilla y salió.

Comenzó el segundo tiempo, Momo intentaba quitarme la marca de la chica, pero no podía, me dio la impresión que no le importaba el juego, tal como dijo Momo, sino molestarme a mí, empezaba a ser cansado. Decidí jugar rudo. En la siguiente pelota que me llegó la empuje e hice gol. Pero no sabía lo que venía. Para el tercer gol me llego la pelota elevada, la perseguí y me posicioné para cabecear y lo hice, salté alto y escuche como cantaban gol, sin embargo, alguien me embistió tan fuerte que cuando caí sentí mi rodilla crujir y un dolor excesivo.

Una Cosa Llamada Vida JENLISA - CHAESOODonde viven las historias. Descúbrelo ahora