8~ Estás confundido.

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|Presente|

Lunes 30/01/2023

Me puse una alarma a las ocho de la mañana. Nada más despertarme llamé a mis abuelos, deberían estar preocupados por mí.

—¡Hijita! ¿Qué tal tu vuelo? No me has dicho nada.

—Hola abue, llegué a las doce de la noche y súper cansada, por eso no te llamé, además allí son seis horas más que aquí, yo me acabo de levantar son las ocho, supongo que allí serán las dos.

—Pues si que son las dos, uy que mareo esto de las horas.

—Si es verdad abue, bueno os dejo comer, y te llamaré todos los días a la hora de comer ¿Vale?

—Vale, ¿Qué tal la casa?

—Es muy bonita y lujoso, tranquila que haré fotos.

—Me alegro, bueno te dejo que se me queman las lentejas.

Me despedí de ella y fui a la habitación de Maxi, pues pensaba que estaba aún durmiendo. Toqué varias veces a la puerta de su habitación pero nadie contestaba, por lo que decidí abrir la puerta, él no estaba en su cama, por eso grité su nombre un par de veces.

—¡Eh! Estoy aquí.— Abrió la puerta del baño y salió con una toalla enredada a la cintura y con el torso descubierto.

Al instante me puse muy nerviosa y un poco roja.

—Em... Que yo pensaba que estabas durmiendo.— Miré al suelo mientras me rascaba la nuca.

—Ya ves que no.— Hubo un corto e incómodo silencio. —¿Tú te vas a duchar?

No le mires a los ojos.

No le mires a los ojos.

Me repetía constantemente.

Pero realmente no sabía por qué estaba tan nerviosa, muchas veces le he visto sin camiseta y no me he puesto nerviosa ni mucho menos roja.

—¡Eh! Claudia eoo...— Pasaba la mano enfrente de mis ojos pero yo lo ignoraba.

Dejé mi mundo y veía a Maxi haciendo gesto raros.

—¿Qué?

—¿Qué si te vas a duchar?— Me preguntó gritando.

—E-e em si si, claro, voy a ducharme.— Salí por la puerta lo más rápido que pude.

Me duche y vestí rápido, bajé las escaleras y Maxi me esperaba con una americana que le quedaba muy bien, yo llevaba otra, era diferente, más larga y de otro color.

—He visto un sitio para desayunar que está cerca de aquí, encima tiene muy buenas vistas.

—Pues vamos.— Le di una sonrisa y él tendió su brazo para que yo lo entrelazara y fuéramos ambos como dos abuelos.

Llegamos al lugar y era cierto eso de que las vistas iban a ser bonitas, bonitas no, preciosas, de las mejores que había visto en mi vida. Se veían unas tres montañas y la más alejada estaba nevada, cerca habían varias casas.

Nos sentamos en una mesa de la terraza para así contemplar las espectaculares vistas que habían.

—Hello, good morning, what do you want for breakfast?— Dijo la camarera.

(Hola, buenos días, ¿qué desean desayunar?)

—Good morning, well I would like to have a coffee and a wild fruit yogurt.— Le dije yo.

(Buenos días, pues a mí me gustaría tomar un café y un yogurt de frutas silvestres.)

—I just wanna coffee.— Le dijo Maxi.

DOS CAMINOS +18 |Pablo Gavi ~ Pedri González|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora