DOS CAMINOS +18 |Pablo Gavi ~ Pedri González|

12~ Estamos solos.

|Meses antes|

Lunes 04/07/2022

Primer día de surf, estaba emocionada de volver a hacer este deporte que tanto me encantaba, lo empecé a practicar desde hace unos años y se me dio tan bien que no paré de practicarlo.

Me levanté bastante temprano quería aprovechar todo el tiempo que tuviera para hacer surf, pero antes tuve que ir al garaje a buscar mi tabla de surf.

—Hola Kevin.— Saludé al presidente.

—Hola Claudia, eres la primera en llegar.

—Quiero aprovechar bien las vacaciones.

—Pues eso está muy bien.

—¿Tienes mi neopreno? Creo que lo dejé aquí el año pasado.

—Hemos hecho nuevos neoprenos, te reservé uno.— Me enseñó la prenda. —Toma.

Me lo puse en los aseos y me empecé a meter  al mar.

Después de media hora, cuando terminé de hacer un bottom turn, escuché una voz a lo lejos que decía mi nombre.

—¡Claudia!

Miraba para todos los lados pero no ubicaba en quien me llamaba.

—¡Eh Claudia! ¡Aquí!

Una mano se movía en señal de saludo, enfoqué un poco más la vista y vi que se trataba de Santiago, quien estaba entrando al mar.

—¡Hola!— Dijo, animado.

—Hola.

—Buen bottom turn.

—¿A sí? Lo tengo que perfeccionar.

—Joder pues te sale mejor que a mí.— Reí tímidamente.

—Seguro que a ti te salen mejor otros trucos.

—El cut back es el mejor.

—Ese es el que más me cuesta.

—Cuando quieras te ayudo.

—Digo lo mismo.— Le di una sonrisa confiada.

—Bueno voy a meterle caña.— Empezó a alejarse.

—¡Qué te vaya bien!

—¿Tan bien como te queda a ti ese neopreno? No creo.

Puse mis ojos en blanco.

—Ja-ja muy gracioso.— Dije irónicamente.

—Sabes que es verdad.— Encogió los hombros y rio.

Yo quedé parada, mirando hacia la parte de arena. Continúe con mis prácticas.

Vi el último cut back que Santiago hizo antes de venir hacia mí.

—¿Qué? ¿Te ha gustado?

—No está mal.

—Venga haber tú.— Dijo retándome.

—Me voy a comer otro día mejor.

—¿Por la tarde no vas a venir?

—Tomaré el sol en la arena, leeré... Ya sabes, quiero disfrutar del verano.

—Ya veo...— Pensó. —Venga que te invito a comer.

—El otro día ya me invitaste, ahora invito yo.

Él aceptó y fuimos a comer, lo acordado era que yo iba a pagar, pues no, antes de que me diera cuenta Santiago pagó.