Deafening Silence | George Weasley

18

Intentamos recuperarlo
cuando todo salió mal

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De toda la gente, Fred y George nunca esperaron esta situación. Nunca habían pensado en sentarse en el caldero chorreante con Draco Malfoy, pero aquí estaban. Fred le había explicado exitosamente a George exactamente lo que estaban haciendo allí, sentados con Malfoy cuando podrían haber estado buscando a Iris.

"No la conocía tan bien, pero la conocía". Draco comenzó.

"Espera, no puedo oírlo exactamente..." George estaba un poco molesto por cómo se estaban desarrollando las cosas. Fred asintió antes de agitar su varita. Una pluma y un pergamino aparecieron ante ellos. "Toca con tu varita esta pluma tres veces", le dijo Fred a Draco.

"¿Por qué?"

"Escribirá lo que digas para que mi querido hermano pueda leerlo, perdió la audición en la guerra", informó Fred.

Draco arqueó una ceja pero siguió las instrucciones de Fred de todos modos.

"Entonces, ¿quién es Iris Menkem?" Preguntó George.

Agosto de 1997

Iris se dirigió a la habitación 190 y encontró a su hermana dividida debido a la aparición.

"¡Estarás bien!" Le contó a su hermana que estaba llorando en plena calle. Iris encontró algunas pociones y las aplicó lentamente a su herida.

San Mungo era un desastre. Las heridas, aturdimientos y mordeduras de criaturas fueron mucho más que nunca. A medida que la guerra se desarrollaba en el mundo mágico, la cantidad de maldiciones oscuras e imperdonables utilizadas era asombrosa.

Una vez que terminó de vendar a Adeliene, Iris pasó al siguiente paciente, quien recibió dos poderosos hechizos aturdidores en el pecho. El pobre chico sólo tenía 15 o 16 años.

wIris era una de las mejores curanderas de su época en San Mungo e incluso hizo grandes amigos en ese hospital.

Uno de ellos era el sanador Wells. El hombre era como un mentor para Iris y le permitía ayudarla en muchas locuras complicadas relacionadas con la magia.

Adeliene permaneció en el hospital por estrictas órdenes de Iris. Sus padres ya estaban escondidos, Adeline estaba huyendo de algunos mortífagos y quedó dividida durante su aparición. Iris se negó a esconderse. Quería trabajar todo el tiempo que pudiera pero se acercaba el momento de irse. El ministerio estaba empezando a buscar hijos de muggles y las cosas iban cuesta abajo.

Iris se sentó junto a Adeliene y le habló de su día. El hospital estaba prácticamente vacío y los curanderos del turno de noche empezaban a llegar.

Afuera el viento aullaba y el interior estaba en silencio.

Con el paso del tiempo, Iris no se dio cuenta cuando dormía pero sí notó el sonido que la despertó. Se oyeron fuertes golpes y pisotones.

Iris se levantó de repente con su varita en la mano y salió cautelosamente de la habitación.

Los ladrones abrieron de golpe cada puerta y buscaron hijos de muggles. La niña volvió a cerrar la puerta presa del pánico y el miedo. Adeliene estaba dormida debido a la poción que le habían dado y no despertaría pronto.

Unos pasos se acercaron a ella y no pudo aparecerse con Adeliene. Dejar atrás a su hermana no era una opción. Preparándose para un duelo, Iris esperó a que la puerta se abriera de golpe y así fue.