Capítulo 8

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El rey Rémy viajó en su barco a Genové en cuanto la tormenta cesó. La ansiedad de no saber nada sobre el bienestar de su hijo, le atormentó toda la semana sin cesar.

El hecho de que tampoco pudiera contactar a su esposo, no le ayudaba en nada. Había tenido que permanecer en el castillo del rey Theron, soberano de Adir, quien le había asegurado que en cuanto el huracán cediera, ellos enviarían un mensajero al rey Yves.

La tormenta se volvió tan peligrosa, que él temía por la seguridad de Soobin, aunque sabía que la casa de Genové estaba bien provista y que él era capaz de cuidarse a sí mismo, el miedo irracional a que los elementos acabaran con su hogar, le provocó pesadillas horribles, las que le impidieron descansar durante toda la semana.

Cuando por fin pudieron regresar a Genové, la vista de su único hijo, herido de gravedad sobre la arena, no logró que su corazón se calmara.

Él no tiene idea de cómo fue que se movió tan rápido, pero en menos de 2 horas, Soobin ya estaba siendo atendido en el hospital de Adir por el médico real, la angustia y la duda inundaban la atormentada mente del rey Rémy, y eso solo empeoró cuando Soobin se levantó y le rogó que lo dejara ir a Valleir.

—¡Por favor papá no tenemos tiempo! —Soobin miraba a su padre con una angustia casi dolorosa —. Tenemos que informarle al rey Kang.

—El rey Kang regresó hace una semana a Valleir junto con su esposo, es probable que pueda recibirlos —El rey Theron trataba de suavizar la discusión que había iniciado entre padre e hijo.

—¿Usted puede proporcionarme un caballo veloz, su majestad?, necesito llegar a Valleir esta misma noche —Soobin se dirigió al soberano de Adir.

—Por su puesto Príncipe Soobin, tenemos los caballos más veloces de todo Kroné —El rey Theron le indicó con suficiencia.

—No puedes llegar, así como así a Valleir hijo, ¡entiéndelo! —El rey Rémy trataba de hacerle ver a su hijo que no era lo más sabio de su parte —. La fecha de la audiencia con los reyes de Valleir-Hiver aún no se concreta, ellos te encerrarán en cuanto te vean.

—Lo se padre, pero no tenemos tiempo— Soobin tomo la mano de su padre y le rogo que lo dejara ir.

El rey Rémy suspiró en derrota, y sintió que no tenía opción —Está bien, pero yo iré contigo hijo mío.

—El mensajero partirá en este mismo momento a Ecláire rey Rémy, le avisaremos al rey Yves que los alcance en Valleir —El rey Theron puso la mano sobre el hombro de su buen amigo y le miró con esperanza.

—Muchas gracias rey Theron —El rey Rémy ya se veía agotado, tal vez el cansancio era mental, pero él sabía que no iba a aguantar un minuto más sin su esposo.

Soobin miraba los árboles del camino pasar con velocidad a través de la ventana del carruaje, él sentía que se movía demasiado lento para su gusto, si hubiera sido posible, él mismo se habría ido en un corcel más rápido, pero su padre no le permitió hacerlo. Su pensamiento estaba dirigido a Kai, él debía de estar muy asustado dentro del sucio calabozo del Avalon, solo esperaba que Mingi no lo hubiera...

—¿Te duele hijo? —Soobin distrajo sus pensamientos y miró a su padre con sorpresa, después se miró el hombro vendado. En realidad, Mingi no le había disparado con el propósito de matarlo, él solo quería detenerlo, así que la bala prácticamente le había rozado el brazo, aunque si le provocó mucho dolor, el médico le había suturado bien la herida y en honor a la verdad, él no estaba pensando en eso en ese momento.

—No, estoy bien papi —Soobin miró a su padre —¡Perdóname por arrastrarte de nuevo al caos!, debes de estar muy decepcionado de mí, y no te culpo, yo...

—Yo nunca voy a estar decepcionado de ti Soobin de Ecláire, eres mi hijo, y si yo mismo no te hubiera recogido de los brazos de una monja en el convento, de verdad podría jurar que eres una copia fiel de tu padre Yves, porque esa rebeldía viene de su parte— El rey Rémy entrelazó los dedos con los de su hijo provocándole una sonrisa —. Hijo, yo te amo, y esto es algo que resolveremos juntos, ya verás, todo estará bien.

Soobin no sabía si esa era una afirmación verdadera, pues a pesar de que trataba de mantener la esperanza viva, su corazón no dejaba de sentirse abrumado al no saber nada sobre el bienestar de Kai. Pero por unos momentos, se permitió la ilusión de pensar en que pronto, él estaría entre sus brazos de nuevo y en verdad, todo saldría bien.

El carruaje arribó a Valleir justo al amanecer, los rayos del sol ya se estaban asomando por el pueblo, el castillo ya se encontraba a unos cuantos kilómetros. La noche había pasado llena de angustia total, y aunque Soobin sabía que el calvario apenas comenzaba, él sintió un asomo de esperanza al pensar que Kang Taehyun era la persona que necesitaba para poder salvar a Kai y eso era lo que importaba.

Ni siquiera habían terminado de tocar suelo firme los pies de Soobin, cuando no mínimo de 5 guardias lo contuvieron. Él no ejerció fuerza, el rey Rémy comprendió el predicamento de los guardias y aunque le dolió ver a su hijo sometido, solo les pidió que los escoltaran con sus reyes.

La mirada de odio que Kang Taehyun le envió a Soobin por bienvenida, solo le permitió saber, que el rey aun le guardaba mucho rencor.

Rencor©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora