Marcada | Sam&Mon Omegaverse.

Capítulo 19

Neung caminó hacia su oficina, sintiendo que su ansiedad aumentaba con cada minuto que pasaba. Había estado sufriendo por esto durante años, pero desde que Sam mencionó el nombre de Kirk y seguido por la palabra "secuestro", sintió cómo lentamente se volvía presa del miedo.

Pero estaba completamente segura de una cosa y era de que debía ocultarle a Sam su participación en todo lo ocurrido con Mon, incluso si eso significaba entregar a su abuela.

Su abuela, la mujer que cuidó de ella y de sus hermanas cuando sus padres murieron, la mujer que le dio todo lo que tenía y fue capaz de dar aún más. Pero, ¿valía la pena? Lo que le hicieron a la omega de Sam, lo que le pasó a su querida hermana Song y a sus padres...

Su abuela les había dado todo, intentando compensar lo que hacía muchos años les había arrebatado. 

Hacía ya un tiempo desde que descubrió lo que realmente pasó con sus padres y el papel que jugó su abuela, pero después de todos esos años todavía no lograba descubrir por qué. ¿Por qué su abuela haría eso?

"Necesito relajarme... todo esto me está afectando más de lo que debería", pensó Neung antes de entrar a su oficina y sentarse en la silla junto a su escritorio.

Se relajó, cerrando sus ojos y pensando en todas las decisiones que había tomado a lo largo de su vida. De repente, escuchó cerrarse la puerta de su oficina y entró un hombre de cabello negro, dedicándole una amplia y cálida sonrisa.

- Oye... no te ves muy bien. - dijo, tan suave como siempre cuando habla con su alfa.

- Sí, tampoco me siento bien... - Neung abrió los ojos para encontrarse con los cálidos ojos de un hombre. Ella sonrió, sintiéndose mejor y haciéndole señas para que se sentara en su regazo. - Ven aquí.

Asintió y caminó hacia la mujer después de cerrar la puerta de su oficina, sentándose en su regazo, sintiéndola sujetar su cintura y enterrando su rostro en su cuello, respirando lentamente.

- ¿Estás así por Sam? - preguntó, frotando círculos en su espalda.

- Sí, he estado pensando en qué hacer pero no importa cómo lo mire, es demasiado complicado y tal vez ella termine odiándome...

- Mírate, tal parece que te estás ablandando por tu hermanita, - interrumpió y se rió. - Hace unas semanas ni siquiera podías verla... Me alegra que estés intentando hacer las cosas bien.

- Si, bueno... he visto de lo que es capaz la abuela y da miedo. Necesito asegurarme de que estaremos bien antes de tomar cualquier decisión.

- Pero tienes que hablar con Sam sobre lo que sabes...

- Sí, lo sé. - gruñó Neung luego de sentir como su omega se levantaba y se alejaba de su abrazo.

- Tienes que hablar con ella lo antes posible... - dijo con calma y tomando el rostro de Neung entre sus manos antes de depositar suavemente un beso en sus labios. - Ella también tiene derecho a saber quién los mató... Después de todo, ellos también eran sus padres.

"Desearía que fuera así de fácil..."

*

Mon no podía creer lo que estaba viendo. Sentía las extremidades entumecidas y tenía ganas de vomitar. Ella entendía el concepto de venganza, pero herir tanto a una persona sin sentir ningún remordimiento le parecía surrealista, absurdo y simplemente cruel.

Frente a ella estaba Kirk, con el labio partido, hematomas y cortes por todo el cuerpo. Recordó su cara cuando se conocieron por primera vez, antes del secuestro y todo, pero ahora, esa cara no aparecía por ningún lado. Sin embargo, parecía cuidado, sus cortes estaban limpios y parecía como si acabara de ducharse.