Sólo Es Amortentia || Drarry

Epílogo

25 de Mayo 2001

San Mungo era todo un caos. En realidad siempre lo era, no había momento en el qué alguien llegara con heridas de un animal salvaje, sufriera caídas, citas médicas regulares, control de embarazo, heridos de gravedad por cazar magos oscuros, etc.

Pero ese día, era uno especial para Draco y Harry pues Astoria Greengrass había entrado en labor de parto y pidió qué la pareja estuviera presente por alguna razón qué desconocían y fue por ello qué las tres horas qué tardó la mujer en dar a luz, ellos no se movieron de la sala de espera del área de partos.

—Draco, Harry —Pansy llegó tan rápido cómo pudo hasta ellos, la idea era qué nadie supiera qué Astoria se encontraba ingresada.

—¿Qué pasó? —preguntó Draco poniéndose de pie a la par de Harry.

—Tengo noticias, una buena y la otra no lo es... —Pansy hizo una breve pausa antes de preguntar lo siguiente:

—¿Draco, tú sabías de la enfermedad de Astoria? —La voz de Pansy salió tan preocupada qué ambos tuvieron la sensación de qué algo andaba mal.

—¿Enfermedad? ¿Astoria estaba enferma? —dicho esto, Pansy confirmó qué Draco no tenía idea de lo qué sucedía con la chica.

—Parece ser qué Astoria es víctima de una enfermedad hereditaria, no me dio mucha información, ella quiere hablar con ustedes sobre eso, sólo preguntaba, ah y el bebé nació en perfecto estado de salud y es un niño, pueden pasar a verlos, si quieren

Pansy dudaba qué fuera del agrado de sus amigos ver a Astoria, especialmente de Harry.

—Iremos juntos, no te dejaré sólo amor —dijo el azabache.

Draco asintió y ambos tomaron camino hasta la habitación de Astoria.

Al llegar se encontraron una imagen qué no sabían cómo describir, por un lado el bebé qué Astoria tenía en sus brazos se veía saludable, sus mejillas estaban rojas, su cabello era castaño y la piel la tenía tan blanca cómo la de ella, pero no podían decir lo mismo de la madre del menor. Astoria tenía un aspecto acabado, su piel no tenía color, más bien se veía blanca, casi transparente, su cabello ya no brillaba cómo meses atrás, sus fuerzas habían disminuido notablemente, por lo qué la pareja no estaba segura de cómo reaccionar.

Astoria notó su presencia minutos después en la qué su atención estaba completamente dirigida a su hijo.

—Pasen por favor —aquella voz femenina cargada de seguridad y fuerza, ahora no era más qué un simple recuerdo, pareciera qué le costaba trabajo hablar.

Draco tomó a Harry de la mano antes de entrar y caminar a pasos lentos hasta la cama dónde Astoria se encontraba.

—Mi bebé está bien —dijo ella—, sé qué sabrán cuidarlo cómo lo merece

Ninguno sabía qué decir, así qué sólo asintieron.

—A partir de hoy será su hijo —Astoria les dio paso a qué tomaran al bebé, así qué Harry fue quién lo cargó.

Al tenerlo entre sus brazos no pudo explicar la felicidad qué ahora yacía en su pecho, sonrió con ternura y amor al ver a su hijo entre sus brazos, qué a pesar de no llevar su sangre, lo amarían cómo si lo fuera.

—Cuídenlo mucho, y si algún día pregunta por su madre, díganle qué murió pacíficamente en un hospital, y qué lo amaba mucho —un par de lágrimas corrieron por las mejillas de Astoria.

—¿Qué su madre murió? —Draco no entendía o no quería hacerlo, sobre el pensamiento de la chica.

—Sí, no me queda mucho tiempo de vida, gracias a una maldición de sangre hereditaria en las mujeres de mi familia cuando damos a luz —explicó lo mejor qué pudo, tomando aire de vez en cuando y haciendo pausas largas—, Algunas mujeres de mi familia han sobrevivido o muerto después, pero sé qué yo no correré esa misma suerte

A Harry le provocaba lástima ver a Astoria en ese estado.

—No tenía idea —respondió Draco.

De verdad, ¿Astoria pensaba darle un hijo de otro y luego dejarlos a su suerte? ¿Y sin Harry a su lado?.

—Es un tema confidencial en mi familia, de todas maneras ya no importa, sólo quiero irme en paz con ustedes, y pedirles perdón por todo lo qué hice —dijo Astoria con voz suave y cortada.

La pareja tuvo un gesto de sorpresa en sus rostros, sabían que guardar rencor era malo para ellos y lo único importante era qué estaban juntos, formando una familia.

—No te guardaremos rencor —respondió el rubio.

—Gracias —Astoria sonrió débilmente antes de volver su mirada al frente.

Segundos después pasó algo qué a ninguno le hubiera gustado ser testigo.

Astoria cerró los ojos, su pecho ya no subía ni bajaba, su brazo cayó de golpe en el colchón, ambos se observaron y enseguida salieron el cuarto para avisarle a Pansy del estado de salud de la chica, rápidamente entraron dos medimagos a la habitación y minutos después confirmaron qué Astoria Greengrass había fallecido.

No supieron por qué pero enterarse de esa noticia les había dejado una sensación de tristeza, tal vez por qué la habían visto morir frente a ellos, Pese a la situación, no pensaban flagelarse demasiado, su deber de ahora en adelante sería ver por su hijo y ser esa familia qué tanto desearon.

୨♡୧   

Después de llevar a cabo el funeral de Astoria, Draco y Harry se dedicaron a continuar con su vida y buscar un nombre a su pequeño a quién ya tenían una habitación en su hogar, completamente equipada, la familia de ambos estaba muy feliz por eso y prometieron hacer una celebración a los nuevos padres.

—¿Tristán? —sugirió Draco—. significa el qué no demuestra tristeza.

El rubio tenía un libro con algunos nombres de bebé y su significado.

—Me gusta el nombre pero no el significado —Draco lo presintió y rápidamente se dispuso a buscar otro.

—¿Arán? —sugirió el rubio al cabo de unos minutos leyendo—, significa Valle del Arán

Draco asintió conforme y observó a Harry con el pequeño en brazos, dándole el biberón con la fórmula.

—Me gusta Arán —dijo Harry, curvando una sonrisa en su rostro.

Continuaron buscando nombres pero ninguno los convencía más qué Arán y cuando llamó a su bebé con ese nombre, este sonrío satisfecho.

—Serás Arán mi amor —dijo el rubio cerrando el libro poniéndose de pie para sentarse junto a ellos, su familia.

—Los amo —dijo Harry.

—Y nosotros a ti cariño —Draco besó a Harry en los labios y luego al pequeño Arán en la frente.

Nada podría romper su felicidad por qué su amor era lo más hermoso qué algún día creyeron tener.

FIN. 

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Muchas gracias por leer, nos vemos en la próxima <3