Sk8ter Boy ©

Capítulo II

2 años antes

- Shanna si quieres ve tú, no tengo ganas de salir -expresó con pesadez Rosabelle mientras su mejor amiga Shanna intentaba que salieran del salón a dar una vuelta aprovechando el recreo.

- Vamos, no quiero dejarte sola en el salón, salgamos a tomar un poco de sol y volvemos - suplicó la chica mirando a su amiga con un ligero puchero.

Rosabelle bufó.

- Está bien, pero regresamos rápido, sabes que no me gusta salir mucho - sentenció, para luego salir del salón seguida por su amiga dando saltitos por lograr convencerla.

Ambas chicas caminaban por el pasillo principal en busca del patio, donde todos los estudiantes se reunían para conocerse o simplemente estar con sus amigos en los ratos libres. Ser estudiante de primer año es algo difícil dado que todos te tienen en la mira por ser nuevo en la escuela. Rosabelle miraba de reojo a su mejor amiga, mientras saludaba a sus conocidos a medida que caminaban por el pasillo, juraba que al menos conocía a la mitad del alumnado de cada año que cursaba en la escuela.

Shanna Garrett siempre fue alguien muy extrovertida y sociable, bastaba un poco de tiempo a su lado para que terminara siéndote agradable estar con ella, razón de más por la que tenía muchos conocidos y amigos. Rosabelle ni siquiera entendía porque una chica como Shanna la había escogido a ella: una persona aburrida y callada para considerarla como su mejor amiga.

- ¿En qué piensas? - preguntó Shanna, llamando la atención de Rosabelle -

- En nada - su amiga la miró, arqueando una ceja dudosa de su respuesta, conocía a Rosabelle lo suficiente para saber que podría estar pensando - Es enserio, no te preocupes.

- Bueno, sí tu lo dices - agregó, dirigiendo su vista al frente para luego tomar a su amiga de la mano - Ven, quiero presentarte a alguien.

Sin tiempo a agregar nada, fue obligada a correr por el pasillo hasta un punto en específico: los casilleros; había un chico de pie escuchando música, en su mundo. Shanna le hizo señas y él le sonrió, parecía que se conocían y al ver que Shanna no venía sola, se quitó los audífonos y redirigió su mirada.

- Shanna, es bueno verte de nuevo - dijo, acomodándose el abrigo que traía puesto - A ti y a... ¿Cómo se llama tu amiga? - agregó.

- Mason hola, ella es mi mejor amiga Rosabelle, la chica de la que te hablé - respondió Shanna - Rosabelle, él es Mason, te lo quería presentar hacia tiempo porque ambos son unos locos de la música y supuse que se llevarían bien.

El chico, Mason, sonrió hacia Rosabelle en una muestra de decir 'mucho gusto' y por reflejo ella hizo lo mismo, por reflejo o porque la sonrisa del chico era bonita, como el que la portaba. Rosabelle tenía ojos, podía reconocer a alguien atractivo cuando lo veía y Mason no era la excepción: Ojos negros, cabello negro algo largo sin peinar casi, y fracciones no tan perfectas pero aún así llamativas dotaban al chico de algo singular que llamaba la atención.

- Así que ¿Te gusta la música en general? - preguntó la chica, apartando un poco la vergüenza de haberse quedado callada un buen tiempo mirándolo.

- Si claro me encanta, incluso estoy empezando a adentrarme en el mundo de la producción y pues - señalo la funda que contenía su guitarra en el suelo - También puliendo detalles con la guitarra, y ¿Tú que relación tienes con la música? - agregó.

- Pues yo solo la escucho, un tiempo estuve aprendiendo guitarra y se lo básico y... he leído mucho sobre la musicología en general, por eso Shanna dice que soy una loca de la música - dijo mirando a su amiga quién solo soltó una leve carcajada.

- La música es algo que se hizo para disfrutar al escucharla y al crearla, pero estudiarla también es parte de todo eso; es genial que te interese esa parte - expuso el chico haciendo sonrojar a Rosabelle con su sonrisa.

- Sabía que sí se conocían iban a llevarse bien, yo nunca me equivoco - dijo Shanna.

- Creo que tienes mucha razón Shanna - agregó Mason - Tengo que irme, le prometí a unos amigos verlos en el tiempo que tuviera libre; nos vemos en otro momento y nuevamente: es un gusto conocerte Rosabelle - dijo, despidiéndose de ambas chicas para luego recorrer el pasillo y perderse en él.

- ¿Y bien? - preguntó Shanna.

- Me pareció amable, además de que parece ser un buen chico dedicado a su superación personal.

Shanna la miró escéptica.

- Tonta, me refiero a otra cosa - expresó, tomando del brazo a su amiga para caminar de regreso al salón - ¿No te pareció guapo? - agregó.

- Bueno sí, un poco pero... - su amiga le lanzó una mirada pícara que le sacó los colores de la cara - ¡Shanna contrólate!

- ¡Hey, pero si yo no he dicho nada! - dijo mientras reía - Al menos lo reconociste - agregó sonriendo, a la par que Rosabelle bufaba bajito.

Así pasaron los días y ambos, Rosabelle y Mason, entablaron una amistad mediada por Shanna, que escuchaba con atención como hablaban de música y de vez en cuando de otras cosas propias de un adolescente. Pero el tiempo pasó y Shanna se fue del país, ambos chicos perdieron la comunicación a pesar de estar en la misma escuela porque al ser tan tímidos no sabían como acercarse el uno al otro y entablar una conversación.

Luego de unos pocos saludos de lejos en el pasillo por parte de ambos, la amistad quedó olvidada, al menos por Mason, porque Rosabelle solo tuvo que atar cabos un día para darse cuenta de algo. De que tal vez, solo tal vez, había empezado a sentir algo por él durante el tiempo que convivieron.

Notas de la autora:
Actualización nueva rapidita, espero que estén disfrutando la lectura
Gracias por leer✨