28 de mayo.
Generalmente, Kendra llega al departamento que comparte con su hermano gemelo, cerca de las 06:00 am, entra con cuidado para no despertarlo, sabe que Banon, ensaya hasta muy tarde con su violín y no desea despertarlo para ver su cara de pocos amigos.
Duerme hasta cerca de las 15:00 pm, cuando es la hora en que su hermano empieza a practicar.Perezosamente, habré los ojos y siente el cosquilleo que dejaron los besos de Ed. en sus labios, no era su primer beso, pero era el primero que lo dejaba tan pensativo, Ed no era un ser amigable con él, siempre lo mira con desprecio y cierta altanería.
Trata de no sobre pensar las cosas y con un impulso de sus piernas se pone de pie, para ir adarce un baño, pero los recuerdo mientras lava su cabello vuelven a parecer, haciendo que sus manos se agiten bruscamente en su cabello lleno de espuma.
—Basta... Solo fue un estúpido beso, cálmate— Se repite mientras respira profundo, pero miro el corte en su mano y sintió escalofríos recordando los ojos grises de Ed— Estúpido, idiota... Fue solo un beso, calma, calma.
Confundido y un poco irritado, caminaba buscando a Banon, por el departamento, necesita verlo y hablar, venía caminando mirando su mano cuando vio a su hermano entrar en el departamento que comparten.
—¿De dónde vienes?— Quiso saber Kendra, cuando vio a su hermano ponerse nervioso.
—De comprar— Respondió rápido, caminando, sacándose el abrigo y su gorro de lana para ir a la cocina.
—¿Y qué compraste?— Pregunto mirando las manos vacías de su gemelo. Poniendo sus manos en la cintura, mirándolo desconfiado.
—No encontré lo que quería... Paris... Deberíamos ir a cenar con Paris— Trata de cambiar la conversación que es incómoda para él.
—Sé que mientes... Tú lo sabes bien— Dijo caminando lento hasta quedar cerca de su hermano.
—Es difícil de contar, solo dame tiempo— Dijo nervioso tratando de no mirarlo.
—Solo dime que estás bien— Hablo arreglando la sudadera de Banon tratando de calmarlo.
—Estoy bien... Solo es algo que no quiero compartir por el momento... Espero que entiendas— Respondió moviendo sus manos y jugando con sus dedos, no quería que Kendra se sintiera mal por no poder contarle.
—Me conformo con saber que estás bien... Y deja de moverte, solo me pones nervioso— Respondió dándole una palmada a sus manos para que se tranquilizara.
—Kendra... Gracias por entender— Dijo abrazándolo.
—Que sea tu hermano gemelo, no quiere decir que debes decirme todo lo que te sucede, solo te pido que sí, estas problemas, no me lo ocultes, lo de más es tu vida privada y si no lo quieres compartir es tu decisión, no me siento mal por eso— Respondió dándole una palmada en la espalda de Banon para que lo soltara de una forma muy seria demasiado seria para ser Kendra.
—¿Qué le sucedió a mi hermano pequeño?— Dijo mientras empezaba a prepararse un café.
—El trabajo te hace madurar y crecer como persona, deberías intentarlo— Hablo de forma sarcástica, apuntándole una taza para que también le preparará un café.
—¿Qué te sucedió en tu mano?— Pregunto Banon, mirando el corte que tenía Kendra en su mano.
—Nada, es solo un pequeño corte— Y escondió su mano sintiendo el calor que golpeaba sus mejillas.
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¿Soy...Un Omega? La historia de amor de Kendra y Edmon
عشوائيsegundo libro de ¿Soy...Un omega?