Invierno

Capitulo 12

Observo atentamente como la joven entraba a clases, bajando de aquel auto blanco.

Anaya mantenía un ritmo de vida totalmente distinto al de él, siendo dos extremos que, quizás, nunca se juntarían.

Fumo un cigarrillo, esperando que ella entrara, decidiéndose en si ir o no detrás de ella.

¿La molestarían en su ausencia?

La respuesta era sí, pero aquella extraña chica había aparecido y era la hermana de alguien grande dentro de las pandillas.

—Pareces un idiota— Susurro Haru detrás de él, haciéndolo que se girara.

—¿Qué haces aquí?

—Te vine a ver— Dijo simple— Compre desayuno, si no vas a entrar, come conmigo.

—¿Te estás volviendo maricón? —Le dio otra calada, asintiendo.

—Tal vez, al menos estoy más decidido que tú con esa chica.

—¿A qué te refieres?

—Tus ojos te delatan, no miras a nadie más así más que a ella— Sus ojos azules fueron honestos, comenzando a avanzar.

—Tal vez— Sonrió, botando el cigarrillo, pisándolo luego.

La duda comenzó a crecer en él, estando pendiente de cada mensaje que recibía y yendo la mayoría de días para verla de lejos, sin entrar ninguno.

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Bebió la quinta cerveza, siendo observado por la analítica mirada de Kisaki, quien no había tocado aún nada de lo que tenía en la mesa.

—¿Qué piensas? —Pregunto el rubio, acomodando sus lentes.

—¿Quieres estar en mis pensamientos? Egoísta— Bromeo.

—¿Es esa chica?

—¿Qué quieres saber? Dilo de una vez— Mantuvo su mirada aburrida, sin desviarla del rubio.

—No mantienes aquí como antes.

—¿Acaso me extrañas? —Bebió nuevamente, entrecerrando los ojos.

—Tú eres mi arma para hacer todos los planes que llevaré a cabo, no necesito que esa “arma” ande detrás de una ordinaria chica.

—No he dejado de cumplir con lo que quieres— La voz de Hanma fue ronca, incluso sería— Ni tú, ni yo, ninguno de los dos, se mete en la vida del otro. ¿No fue lo que tú mismo dejaste en claro?

—Lo rectifico, no te enamores de ella, son demasiado diferentes.

—Tú no serás quien me diga que hacer en mi vida personal— Musito, dejando la cerveza a un lado.

—Eres enemigo de demasiadas personas para tener una debilidad — Frunció el ceño— Solo estoy advirtiéndote.

—No tienes por qué.

—Averigüé acerca de la familia Takahashi, son una pareja muy importante, pero que no pueden tener hijos— Kisaki miro a Hanma quien no se inmutó— Es una extranjera sin familia, alguien con quien no deberías perder el tiempo.

—Tú lo pierdes conmigo— Sonrió levemente— No tengo madre presente y mi relación con ella es la que gatillo mi actuar. ¿No te servimos la gente así?

—Sí— Acomodo sus lentes, sonriendo— Mientras más roto, más manipulable e influenciable.

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