I CAN SEE YOU | LYNN LOUD JR ✓

capitulo quince

↳ 「 Harriet's POV 」

—Eso de mentirle a tu novio no creo que sea buena idea —me dice Lynn al montarse en mi auto. Al fin y al cabo si tenemos un trabajo que hacer.

—Es una tontería mi mentira —me encojo de hombros.

—No sé si te acuerdas, pero en la pijamada me dijiste que él quiere dar ese paso y tú no.

Esa era una de las partes que recordaba de esa noche.

—No quiero hablar de eso —le digo y ella asiente.

Nos ponemos el cinturón de seguridad y ella saca de su bolso mi teléfono y me lo extiende.

—Gracias —musito dejando el teléfono en mis piernas y empiezo a manejar saliendo del colegio.

—Voy a tomarlo para poner música —me dice y asiento. Ella toma mi teléfono y lo desbloquea para poner una de mis playlist.

De camino a mi casa ella se la pasa cantando las canciones mientras se fija en los alrededores.

—No es por sonar aprovechada, pero... ¿Tu chef nos hará comida?

—¿Que quieres comer? —le pregunto.

—Es una respuesta muy difícil, rubita —bufa ella y se queda en silencio pensando— ¿Lasaña?

—Podría decirle que cocine eso, pero no sé si ya tenga el menú en mente.

—Gracias —me sonríe y a los pocos minutos llegamos a mi casa— ¿Tu papá no está, verdad?

—No lo vas a ver, tranquila —le digo bajándome del auto.

Las dos entramos a mi casa y tengo la sorpresa de encontrarme con mi mamá en la sala.

—Pensé que vendrías con Camille —me dice mamá.

—Ella tuvo que quedarse con una chica nueva —le respondo a mi mamá sonriendo. Por suerte el entrenador mandó a Camille con la nueva— nosotras vamos a hacer un trabajo, mamá.

—De acuerdo cariño, me avisas si necesitan algo —me sonríe mamá y empiezo a caminar con Lynn hacia mi habitación.

—¿Exactamente de que iba el tema? —me pregunta ella sentándose en la silla de mi habitación y dejando su bolso en una esquina.

—Los seres vivos y todos los procesos y sistemas relacionados con la vida —le respondo sentándome en mi cama— necesitamos una cartulina para empezar.

—Cierto —asiente ella y me extiende una cartulina de tubo que estaba en su bolso— le pedí a la profesora que me diera una, tienes marcadores e impresora ¿No?

—Si.

—Obviamente que tienes, eres millonaria —murmura y da una vuelta en mi silla— ¿Cómo comenzamos?

—Investigando, Lynn —le respondo con obviedad— dame espacio en la silla, no tengo otra.

—Busca otra silla, me gusta esta.

—No, dame un espacio, la silla es grande —entrecierro mis ojos hacia ella y me sede parte de la silla.

Abro mi laptop, ingreso mi contraseña y pongo el tema que tenemos que hacer.

—¿Que va a cocinar hoy tu chef? —me pregunta mientras sigo buscando en internet más cosas del tema.

—¿En serio estás pensando en comida?

—Es lo que me motiva a venir a tu casa —me sonríe— porque obviamente hacer tarea no es nada motivador.

—Hay gomitas en esa gaveta —le digo señalando la gaveta de mi escritorio.