(El príncipe Vekar empieza a arrojar todo a su paso en modo de rabieta)
Príncipe Vekar: ¡Parece que todos ustedes inútiles soldados no se toman en serio la misión de conquistar la Tierra! Si yo pudiera ser un dios hace mucho que habría hecho que el planeta sea nuestro.
Damaras: Señor no se altere, algo se nos ocurrirá.
Príncipe Vekar: Detengan el tiempo un segundo, ¿acaso me diste una orden en mi propia nave y delante de mis sirvientes?
(Levira revisa en la computadora que una "nave royal" aterriza junto a la de ellos)
Levira: Señor, una "nave royal" ha abordado a la nuestra.
Príncipe Vekar: Esas son las que mi padre manda una vez al año, creo que estoy en problemas.
(El príncipe camina hasta la entrada donde es sorprendido por dos "soldados royal")
Príncipe Vekar: ¿Tienen un mensaje de mi padre?
Soldado royal#1: Uno muy grande señor.
Soldado royal#2: Nuestro señor el príncipe, le presentamos solo para usted el "Megazord Zangyack". El arma de combate más poderosa del imperio.
(Los "soldados royal" quitan una sábana del camino revelando al "Megazord Zangyack")
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Soldado royal#1: Está equipado con los más recientes adelantos tecnológicos en sistemas y armamento del ejército.
Damaras: Sí, es una belleza mi señor. Pero ...
Príncipe Vekar: Sé lo que piensas, ¿acaso crees que no soy lo suficientemente hombre como para manejar este Megazord?
Damaras: No, yo decía que ...
Príncipe Vekar:¡A callar! No puedo esperar a usarlo ... esto es magnifique. Le enseñaré que soy todo un hombre y a mi padre matando con mis propias manos a los piratas. Hoy es el gran día donde por fin seremos campeones.