Creado Para Esto

Capítulo 47

-Y por eso pensamos que algo del otro lado pasó -terminó de contar Billy.

-¿Alguien te ha estado acosando? -preguntó mi hermoso novio y yo asentí dándole poca importancia a la situación.

-¿Cómo habrá conseguido sea lo que sea que le esté dando ese olor? -cuestionó en voz alta Steve.

-Voy a llamar a los demás -avisó Dustin.

-Pudo haber sido una prueba para abrir el espacio a todas las bestias -propuso el menor antes que le contestaran.

-No creo, habría un olor a portal por la zona -señalé -pero él es el único que lo tiene. En su pelo.

-¿Puede abrir un portal en su cabeza? -preguntó mi compañero de trabajo.

-¿No estaría muerto en ese caso? -contradijo Eddie -tal vez tu nariz no funciona bien por el cloro -acarició mi cabeza.

Negué.

-Pudo oler que el pequeño no se ha cambiado de ropa interior en dos semanas desde aquí -comenté -y ni siquiera está en este piso.

-¿Será un nuevo shampoo? -pensó Billy.

-Es una pena que Wilbur esté en el campamento, él tiene un catálogo con los aromas de todos los productos de higiene -informó el de cabello alocado.

-¿Por qué...? -interrumpieron a Steve.

-Le causa mucho estrés el no saber a qué huele en todo momento. No le gusta pensar que puede oler mal -explicó vagamente.

-Bien -llamó la atención mi hermano -Billy y Siete van a salir a buscar algún rastro de olfato o algo raro. Los demás vamos a esperar a que lleguen y descartaremos olores que formen la combinación que buscamos.

-El "otro lado" huele a naftalina, carne quemada podrida y hielo contaminado -enlisté.

-¿No sería mejor que tú o yo fuéramos? -preguntó Eddie mirando a Steve -Billy no podrá entenderlo.

-Pero ha entrenado con él y es más fácil que le siga el paso -respondió -si se echa a correr por haber olido algo, él va a ser más de ayuda.

-No te preocupes, volveré pronto -sonreí, lo besé y salí junto a mi amigo.

Nos adentramos en el bosque ya que muchos portales se han abierto y cerrado por ahí.

-Oye -volteé dando a entender que lo escuchaba -con tu novio hemos intentado arreglarlo, pero creo que deberías saber que hay un imbecil esparciendo rumores de que eres un demonio.

Eso me calentó el corazón. Es muy dulce de su parte preocuparse. Pero les haré saber después que no era necesario.

Seguimos caminando en silencio hasta que volví a sentir ese olor. Partiendo mi carrera al instante.

A medida que avanzaba el olor se mezclaba con el desagradable de la marihuana.

Llegué a un pequeño claro en el bosque donde había una porrista de mi clase fumando esa cosa.

Esperé a que se fuera y con la nariz en el piso olfateé por pistas.

No quedaba rastro del olor.

Fuí por dónde había ido la chica ocultando mis partes animales y toqué su hombro.

-Oh, eres tú -comentó al verme -¿También fumas acá? -negué.

También venía el olor de su cabeza.

-¿Has cambiado algo en tu cabeza? -no sabía muy bien cómo preguntar.

-Ah, cierto que no hablas -rió nerviosamente -no te entendí. Pero no eres el único. Yo hablo y grito, pero aún así nadie puede entenderme.

¿Por qué me dice todo esto?

El olor también venía de su cabeza, pero no estaba por su cola de caballo.

Eso descarta cualquier shampoo. Hay algo del "otro lado" dentro de su cabeza.

-¡Siete! -gritó Billy llegando donde nosotros -oh, hola.

Me miró rápidamente y yo asentí levemente.

-Ah, espera ¿Ustedes estaban...? -parecía asombrada y asqueada por algo.

-Entrenando -interrumpió mi amigo -nos quedan tres vueltas al pueblo. Solemos entrenar en las mañanas, pero hoy tuvo que ser ahora. ¿Estas practicando tu rutina? -se le acercó mucho.

Bueno, no es la madre de alguien.

-Supongo que los dejaré entonces -se apartó de él, se despidió de mí y se fué.

-¿También tiene ese olor en la cabeza? -asentí -no entiendo qué les puede estar pasando.

Seguimos caminando un rato hasta que otra vez sentí el mismo aroma, pero por un breve momento cerca del lago y desapareció.

-Ya es como la 1:00am -bostezó mi acompañante -¿No es momento de volver con los demás?

Suspiré confundido con toda la información.

Era extraño por donde lo vieras.

Ninguno de los dos parece alguien que tuviera habilidades como las de mis hermanos, tampoco hay rastros de algún portal y solo tienen el olor en la cabeza.

¿Cómo llegaron a eso?

Abrí la puerta con mucho sueño y ví a Max, Nancy, Mike, Lucas y Dustin dormidos por el suelo.

-¿Descubrieron algo? -me preguntó Eddie con la sonrisa más hermosa del mundo.

-Hay otra persona de nuestra escuela con el olor, pero no es del cabello -comenté extendiendo mi mano para ayudarlo a pararse.

-Todos a dormir -susurró Steve saliendo del baño -ya mañana cada grupo va a mostrar lo que descubrió.

Levanté mi pulgar y tomé a mi novio suavemente para ir a mi habitación.

Le presté ropa y me entré a bañar para después ir él.

-¿Cómo te sientes? -preguntó tomando mi cara después de salir.

-Muy cansado -respondí simple -¿Y tú?

-Sabes que no me refería a eso -rió ligeramente.

-Agradecido -contesté -es mejor que sea feliz con su nueva familia al haber cometido el error de encadenarla a mí en contra de su voluntad  -lo acerqué -también estoy agradecido de tener un novio tan lindo y considerado. Pero no era necesario el tratar de parar rumores sobre mí. No me importa lo que otros piensan. Me importa que tú sepas lo que es real.

Me besó con una sonrisa, aunque podía notar sus ojeras.

-Lo sé -suspiró -pero me dan ganas de romperles la cara con mi guitarra cada que dicen algo de tí. Sobretodo ese maldito jugador de fútbol...

-¿Él ha estado esparciendo los rumores? -asintió -entonces fué mi culpa. Trató de decirme mentiras de tí, y como en ese momento no estaba comiendo o durmiendo bien, lo asusté con mi verdadera forma. Tengo ganado que hablen mal de mí.

-Pero si yo encuentro que luces genial tal y como eres -me abrazo, a lo que correspondí.

-Yo creo que tú luces asombroso -señalé antes de acostarnos y abrazarnos.

-Buenas noches -me dió un pequeño beso, le sonreí genuinamente y nos dormimos.

¡Hola!

Espero que se encuentren lo mejor posible y les haya gustado el capítulo.

¡Nos leemos luego!