Capítulo 22

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Después de media hora, habían llegado y el automóvil se había estacionado frente a una casa grande e imponente, pero aún así de perfil bajo, sin llamar la atención.

Todos salieron de los vehiculos para ingresar rápidamente a JungKook en el interior de la casa, JiMin trató de estar cerca del azabache lo más que pudo.

Una vez dentro, notó que habían dos mujeres mayores y un señor que vestían batas hospitalarias, todos con guantes y rostros cubiertos por mascarillas.

— ¡Llévenlo en esa habitación! — gritó apresuradamente el que JiMin suponía sería el doctor.

Los hombres cargaron cuidadosamente el cuerpo de JungKook en una camilla improvisada que encontraron allí, para que luego las enfermeras lo arrastren por los pasillos y lo metan en una habitación.

Una vez dentro, JiMin quizo entrar junto a él pero las enfermeras le dijeron amablemente que no podía entrar.

Resignado, volvió a la sala donde los demás estaban guardando nuevamente sus cosas en sus lugares, algunos curaban sus heridas, mientras que otros solo atacaban la comida que había en la gran mesa del comedor.

JiMin se acercó a Christopher que se encontraba sentado en el sofá.

— ¿Cuánto tiempo estuviste ahí? — preguntó después de un largo silencio.

Christopher lo observó para después soltar un inaudible suspiro.

— Mi padre me vendió a uno de los clientes de JinYoung hace unos seis años. Cuando vieron que tenía 'potencial' decidieron revenderme al proxeneta más poderoso de Italia. 

— ¿JinYoung? — preguntó sorprendido.

Christopher lo observo con una ligera sonrisa, las expresiones asombradas de JiMin eran demasiado tiernas a la vista de cualquiera.

— ¿Él era un proxeneta también?

Christopher fruncio su ceño.

— Tu lo...

— No le digas nada más. — lo interrumpió JiMinnie. — Por favor, no le cuentes más nada de JinYoung, JiMin nunca supo en toda su vida que el era un proxeneta. ¿Sabes porqué no lo sabe? — preguntó JiMinnie.

— ¿Porque?

— Porque yo era uno de sus juguetes. — respondió mordiendo su labio inferior. — JiMin no sabe y no sabrá nunca que su cuerpo fue profanado de tal manera. — esta vez habló con voz grave, observando fijamente al peliplateado, lanzando una indirecta de que no le contara nada o le iría mal.

— No sabía que fuiste tú quien pasó por esos momentos. — Christopher miró sus manos, sus nudillos rojos, raspados y bañados en la sangre de JungKook por cargarlo a cuestas.

— Se que no podré ocultarle todo su pasado por mucho tiempo más, pero al menos quiero mantener esto enterrado.

Después de un largo silencio, en el que ninguno de los dos hablaba y ambos estaban absortos en sus pensamientos, una voz interrumpió los pensamientos de ambos.

— ¿Creen que saldrá todo bien? — preguntó MinGyu sentándose en el sillon individual.

— Lo hará. — aseguró JiMinnie recostando su espalda en el cómodo sofa de terciopelo.

— Pero ¿Y si no? — YoonGi entró en la sala con un rostro serio. — JiMinnie, tú más que nadie sabes que aquí no nos hacemos ilusiones.

— Se llama realismo. — lo observó con el ceño fruncido.

— No pequeño, se llama optimismo y tú no quieres aceptar que muy posiblemente JungKook no se salve.

— ¡Cállate! — gritó el pelirosa.

𝑨𝑴𝑵𝑬𝑺𝑰𝑨 [𝑲𝒐𝒐𝒌𝒎𝒊𝒏]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora