Capítulo 17

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JiMin daba vueltas en su habitación, caminaba de un lado a otro mirando sus pies mientras mordía la punta de sus dedos insistentemente. Hacía eso cuando tenía una preocupación, estrés o si estaba esperando algo lo cual lo ponía ansioso.

¿Porqué Park JiMin estaba dando vueltas alrededor de esa gran habitación como todo un esquizofrénico?

Esa ansiedad o preocupación como se le llame, tenía nombre y apellido.

Jeon JungKook.

Ya habían pasado más de una semana y no sabía nada del exterior, el día anterior Christopher había entrado en su habitación para dejar sus prendas para la cena que tendría con el pelinegro, recordó que estaba dormido en la cama por el cansancio que tenía, hasta que se dió cuenta que al abrir sus ojos, vió que tenían en sus manos una cajita muy pequeña, al abrirla solo había un hermoso collar con un dije de cereza, era completamente plateada; cuando levantó la vista al plateado, este lo observo con una sonrisa amable antes de retirarse, volviendo a cerrar la habitación con llave.

Eso había pasado el día anterior, pero lo que lo tenía preocupado es que no sabía absolutamente nada de JungKook, tuvo un sueño muy feo en donde dudaba si era un sueño o un recuerdo, no podía confiar ni siquiera en él mismo.

Soñó que estaba escondido destrás de varias cajas negras, era raro el sueño, él estaba parado viendo cómo él mismo estaba escondido entre esas cajas; era como si él estuviera en un recuerdo y no podía hacer nada para cambiar eso. Vio que estaba llorando, tendría cerca de trece a quince años, era joven y con cabellos rosados, igual a los que tenía en ese momento.

Levantó la vista del pequeño JiMin para observar su alrededor, casi se cae debido a la impresión. Era su habitación pero más cuidada, mucho antes del desastre que ocurriría ahí. Volvió su vista al pequeño JiMin y acarició sus cabellos con cariño, como si pudiera arreglar esa alma rota con cariño... lástima que de su alma solo quedaban restos.

Se alejó lentamente observando todo a su alrededor, los muebles que antes estaban rotos y sucios, llenos de moho y con un claro olor a humedad; ahora se encontraban en perfectas condiciones, todas bien cuidadas, la cama bien tendida mientras los juguetes estaban guardados en el lugar correspondiente. Por más que JiMin fuera un adolescente podía notar que no dejaban que cambiara esa habitación, no dejaban que decore su habitación a su gusto.

Se preguntó ¿Porqué el pequeño JiMin estaba llorando?

Se acercó a la puerta y cuando quiso salir, esta se abrió dejando ver a un JinYoung con una sonrisa carismática.

— Pequeño, te dije que no llores más. — JinYoung se acercó para acariciar los rosados cabellos del menor.

El menor levantó su vista hacia el pelinegro sorbiendo su nariz y limpiando los rastros de lágrimas en su rostro. Lloraba por su culpa, él había metido en su habitación a un señor de la misma edad que él y no le gustó para nada lo que hizo con él...

El pequeño JiMin de tan solo quince años sabía lo que JinYoung hacía, jugaba con su cuerpo y mente para debilitarlo y dejarse manipular; JinYoung tenía el control la mayor parte del tiempo, traía a algunos hombres o mujeres adultas para jugar descaradamente con el cuerpo del menor y así JiMin se doblegaría ante JinYoung pidiendo clemencia para que deje de hacer eso, básicamente JinYoung prostituía a JiMin para tener el control total del pelirosa, tanto fisica como mentalmente... Pero a pesar de todo eso, no podía lograr su cometido por culpa de él.

Él entró en la vida de JiMin a los cortos siete años de edad, JinYoung no podía hacer absolutamente nada, no mientras él esté cerca de JiMin...

𝑨𝑴𝑵𝑬𝑺𝑰𝑨 [𝑲𝒐𝒐𝒌𝒎𝒊𝒏]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora