Nuevos Métodos

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Sentía la calidez, estaba despierta hace poco, aún así sentía el abrazo de amity y su cabeza sobre mi pecho, se había portado más cursi de lo usual anoche, así que decidimos pegar nuestras dos camas y hacer una cama gigante, así podíamos dormir juntas. Y por suerte aquel tubo de tabaco ayudo con mi problema, amén diría superiora.

Mire el reloj sobre la mesa, era más tarde de lo que suelo levantarme, después de eso mis ojos se posaron en la niña duermiendo a mi lado, era incluso más linda inconsciente, tal vez porque no tenía su rostro de odio hacia el universo incluso podría pensar que estaba sonriendo, vi el reloj marcar las siete, sip era tarde.

-si te levantas te mató. -la voz somnolienta de amity me sorprendió

-¿no estas dormida? -

Asintió -estaba. ¿Qué tienes importante para hacer? -reclamo aun con los ojos cerrados

-tengo una rutina, estoy dos horas tarde. -

Pude ver aun con sus párpados cerrados como giraba los ojos-tus músculos no desaparecerán si no haces ejercicio un día. -

-si lo harán, y tu también vas tarde, qué no estés en el internado no significa que no debas levantarte temprano. -

Hizo una mueca-cállate.-dijo abrazándome más fuerte

-ami...-

Rogué, ella suspiró-¿Quieres que sea directa? -dijo por fin abriendo sus ojos, era hermosa recién levantada, asentí-quiero estar contigo todo el tiempo-

Mi corazón se iba a salir de mi pecho, claro que amity no estaba diferente, se estaba ocultando bajo mi cuello-bueno, entonces ven conmigo corramos un poco-

De un momento a otro se volteó dándome la espalda haciendo un sonido-olvídalo, diviértete te veo más tardé -cerró sus ojos de nuevo

Reí parándome de la cama-qué floja, vamos párate para que vayas a desayunar.-

-¿por qué? ¿Te quieres bañar conmigo acaso? -entre pánico, ¿quiero? Si, ¿debería?

Tal vez.-ah... -

Su risa me interrumpió-dile a tu amiguito qué se calme, no me quiero bañar. -

Tape mi entre pierna por mero reflejó -yo si decía que no te bañabas -dije tratando de disimular a lo mencionado por amity, ella sonrió, me saco el dedo del medio y siguió durmiendo plácidamente.

Mire hacia mis pantalones sin duda tenía un problema, tome una ducha fugaz con agua casi a punto de hielo, si me preguntan si funcionó, no tanto como esperé. Salí de la ducha buscando una camisa, amity estaba de nuevo dormida totalmente, sin levantarla le puse una alarma en diez minutos, no puedo permitir que este sin desayuno

Salí de la habitación, a varias monjas se les hacía curioso el ver como compartía habitación con una chica de mi edad, no lo cuestionaban sin embargo si se lo preguntaban estaba segura, ganándome más de una mirada curiosa, sin mencionar claro que mi "compañera" de habitación habla hasta por los codos y es demasiado liberal, y me disculpo a mi misma por lo que voy a decir pero aquella mini falda qué usaba ayer, Dios. Si qué gus tenía razón cuando dijo que fue la mejor invención del ser humano.

No era la primera vez que veía algo así, quiero decir, las chicas usan uniforme en el internado, y son chicas, realmente odian la falda si no es como quieren que sea, logre radicar el largo de la falda debido a tanta queja de ellas, sin embargo, amity tiene el premio a una falda tan corta, creí que solo era su forma de rebeldía, pero toda su ropa parece ser así, no me molesta, quiero decir, sus piernas son...buh ni como explicarlo.

En Casa SantaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora