O16: FELICIDAD

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JiMin nunca había sido fan de las mañanas, levantarse temprano para ir a la universidad y todo el arduo trabajo que conllevaba ser estudiante, sin embargo, sus mañanas habían cambiado drásticamente ese año, puesto que, ahora estaba YoonGi dentro de su rutina y aunque al principio no era muy notorio, ahora se encontraba despertando entre sus brazos.

El omega estaba seguro que ver a Min YoonGi al despertar era de los mejores paraísos.

Con cuidado de no despertar al mayor, JiMin se acomodo entre aquellos fuertes brazos y observó con cariño el plácido rostro de Min, sus ojos recorrieron desde el desordenado cabello rojizo, las delgadas pestañas, aquella suave nariz, esos labios entreabiertos rosados y por último, su suave y pálida piel. El rubio no podía estar más enamorado.

—¿Disfrutas de la vista? —YoonGi abrió sus ojos revelando el color onix de estos.

JiMin soltó una suave risita.

—Un poco —su sonrisa se mantuvo—. Creo que mi nuevo pasatiempo será admirarte —dijo divertido.

El alfa se reacomodo abrazando al omega, quedando el rostro de este mismo en el pecho del mayor. JiMin aspiró el aroma del hombre con lentitud deleitándose con la preciosa combinación de su aroma con el de Min. A pesar de que ambos querían seguir acurrucados en aquella cómoda cama, tenían que levantarse y empezar con su día.

JiMin fue el primero en meterse a bañar mientras YoonGi tendía la cama, colocando en medio de las almohadas el lindo pollito que había ganado para el omega. Al salir el menor, fue turno del alfa en entrar, por mientras el rubio abrió el armario y comenzó a sacar la ropa que usaría ese día. Se quitó su bata y comenzó a arreglarse.

Después de iniciar oficialmente su relación, JiMin comenzó a compartir habitación con su pareja después de que este le rogara por ello, al final Park no pudo negarse y llevó toda su ropa y sus pertenencias a la habitación principal, igualmente un par de cosas para decorar y mostrar que también ahora él dormía ahí.

YoonGi salió del baño con su toalla alrededor de su cintura, mientras que con otra más pequeña se secaba el pelo húmedo, el cual aun escurría gotas y caían sobre el pecho descubierto del alfa, JiMin siguió con la mirada a su novio, deleitándose con la preciada vista que tenía frente suyo, más cuando el hombre le dio la espalda.

«Por la diosa... », pensó el rubio.

Al sentir que estaba mirando demasiado, decidió concentrarse de nuevo en lo que estaba haciendo, agradeció que logró controlar su aroma antes de que se esparcirse en la habitación, pero a pesar de sus intentos, alcanzó a hacerse notar, haciendo que el alfa se dirigiera hacia su omega, JiMin no se percató de que su novio se acercaba hasta que este mismo lo abrazo por la cintura tomándolo por sorpresa.

—Me asustaste —le reclamó el omega, pero sin siquiera voltearse, puesto que a pesar de que él ya estaba vestido, YoonGi aún tenía el torso descubierto.

Sus mejillas se sentían calientes.

—¿No vas a mirarme? —indagó el hombre alzando una ceja de forma curiosa, gesto que no vio el contrario.

—¿Eh?

El alfa simplemente soltó una ligera, pero grave risa, causando estragos en el cuerpo del menor. Min tomó de la cintura a su lindo rubio y le dio la vuelta, terminando por aprisionarlo entre sus manos y el mueble detrás del chico. YoonGi no pudo estar más satisfecho de ver aquellas mejillas sonrojadas. JiMin ante los nervios, volteo su cabeza para centrar su mirada en otra cosa.

YoonGi no lo iba a permitir, así que tomó con su diestra la barbilla del omega y lo hizo mirarlo a los ojos.

—¿Por qué estás tan nervioso? —preguntó el pelirrojo con una ligera sonrisa coqueta.

we are more than a coincidence © yoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora