Por qué a mi...?

Cap.10

-Ahhh

Ese horrible sueño otra vez. Poco a poco comencé a despejar mi mente para no seguir pensando en mi abuela. Me dolía. Miré a mi alrededor y no vi a nadie.

-¿Habrá sido un sueño?

Lo ultimo que recuerdo fue ver a Nathan en la puerta del baño mientras sangre recorría mi brazo...

Xx: -Por fin despiertas-dijo una voz.
Yo: -Na...Nathan?

En verdad era el. No había sido un sueño en absoluto.

Nathan: -Emi... -sentía una profunda tristeza en sus ojos.
Yo: -Que...que haces aqui...?

Después de decir eso, vi a Nathan abalanzarse hacia mi. Otra vez podía sentir su calor rodearme, otra vez.

Narhan: -Por qué.... Dime Emi, por qué te has hecho eso.-lágrima recorrían sobre sus mejillas.
Yo: -Yo...Yo... quiero que te vallas. Dejame sola...-dije mientras intentaba detener mis lágrimas.
Nathan : -No lo aré. Ya no volveré a dejarte sola.-y sentí la fuerza de sus brazos sujetarme.

No hice ningún intento en soltarme porqué simplemente no quería que me soltara. Estar en sus brazos me hacía bien. Estando en sus brazos, me tranquilizaba...

Pasaron varios minutos después de lo que hablamos. Después me obligó a decirle que era lo que pasaba con mis padres y se lo conté todo. Absolutamente todo. Yo también le pregunté varias cosas y...

Nathan : - Esa es toda la verdad. Si no me quieres creer, no lo hagas. Pero te juro que la maestra y yo no hicimos nada.

Le creía. ¿Como no creerle? Ambos nos prometimos que dejaríamos de hacer todo lo que hacíamos.
Yo dejaría de cortarme y no dejaría que mis padres me maltratasen.
Y el dejaría de obedecer a Ryan.

Los días pasaban y pasaban pero yo sentía que me faltaba algo... A Nathan se lo veían bien. Ya no era el imbecil de antes, ahora era el. Era amable, cariño y, protector... Eso me gustaba. Me hacía feliz, pero me faltaba algo...

Mis padres volvieron de su viaje pero, ya nada era igual...
Ya no se miraban...
Ya no se hablaban...
Ya todo les daba igual...

Yo armé el valor suficiente para preguntarles que era lo que pasaba, pero no contestaron. Se quedaron callados. Yo, realmente no esperaba ese silencio, sino que, yo esperaba un golpe, gritos, algo... pero no.

Pasó un mes y Nathan ya lo sabía todo. El me decía que era la oportunidad para denunciarlos, pero no estaba preparada. Yo quería saber lo que pasaba, quería saber que era lo que había pasado en ese viaje.

Nathan: -¿Y como piensas averiguarlo?
Yo: -No lo sé, pero de alguna manera me lo tendrán que decir, supongo.
Nathan : -No sé qué decirte...
Yo: -No hace falta que digas nada.

Nathan y yo nos quedamos un buen rato ablando sobre que hacer con mis padres. Era todo tan misterioso...

Pasaron las semanas y nada cambió. Justamente era 24 de diciembre, Navidad. Parecía que mis padres no se dieron cuenta de la fecha, pero lo dejé así. No celebré la navidad, con nadie.
Al día siguiente, el 25 de diciembre, recibí una llamada de Nathan.

El- Que tal todo? Pudiste averiguar algo?

Yo- Hola. No, nada en absoluto. Y tu que tal estas?

El -Todo bien. Fue divertido la Navidad. A ti... como te fue?

Yo-Tranquilo, no pasó nada malo, solo que no lo celebramos porque parece ser que a mi padres se les olvidó.

El- No has celebrado la Navidad? Bueno pues aun queda tiempo.

Yo- Como que aún queda tiempo?

El- Pues que es 25. Aún se puede celebrar. Hoy es cuando se abren los regalos. Es que no te acuerdas?

Yo- Regalos...? No creo que hayan comprado nada para mi.

El- Y tu les as comprado algo?

Yo- Porsupuesto, pero decidí no dárselos.

El- Que? Por qué no?

Yo- Es que cada año siempre lo tiran a la basura...

El- Vaya con tus padres... Lo siento...

Yo- Tranquilo. No pasa nada.

El- Igualmente, no puedo hacer como si nada después de escuchar eso.

Yo- Mmm...

El- Tengo una idea. Quieres quedar?

Yo: Esto... mmm sí. Donde?

El-Tu ya sabes.

Yo- En el bosque.

El- Correcto señorita.

Yo- Ok señorito.

El- Eeeh jajaja

Yo- Jajaja

El- Bueno Emi, nos vemos dentro de media hora esta bien?

Yo- Tan pronto?

El- Sip, es que no puedo esperar.

Yo- Esta bien...

El- Jajaja nos vemos princesa.

Colgó

-Princesa?

Pasaron ya la media hora y me encaminé hacia el bosque y allí estaba el.