Este capítulo pasa em la edad media :)
¿Si alguien sabe sobre alguna fanfic de Bram podría decirme el nombre pliss? Gracias 🫂
Una fría noche de invierno, alguien llamó a la puerta del castillo, era una mujer de aproximadamente unos 23 años, Bram en aquellas tenía 25 años y aunque no lo parezca solía tener bastante empatía. La joven se había perdido y llevaba un par de horas bajo la nieve, aunque ella solo preguntó donde estaba el pueblo más cercano, el hombre insistió en que no podía permitir que la joven estuviera más tiempo bajo el frío cielo. Aunque Akira no estaba muy segura de ello, terminó aceptando la invitación del muchacho; ella tomó un baño y tras aquello el hombre si es que así se le podía llamar le ofreció comida.
Para su suerte, aquella semana hubo horribles tormentas de nieve, a penas se podía divisar lo que había unos metros más allá del castillo por lo que Akira tuvo que atrasar su viaje. Pero aprovecho aquellos días para conocer aquel hombre que seguramente le había salvado la vida. Habían pasado horas hablando sobre sus vidas, la joven le contó que amaba leer, en aquellas era extraño que las mujeres supieran leer para entonces, pero al ser de una familia de la alta nobleza había podido aprender algunas cosas como leer, y un poco sobre astronomia. Bram le compartió algunos de sus conocimientos y le hablo sobre su extraño poder, al contrario que la mayoría a Akira no parecía molestarle su necesidad de tomar sangre si no era suya, ella podía hacer aparecer plantas, acto que le parecía muy tierno al mayor.
Al final paso de quedarse una noche a una semana y media, a Bram le había encantado tener la compañía de aquella joven. Pero al igual que todo lo bueno aquello también tenía que irse a pesar de que a ninguno de los dos les gustaba la idea.
Dos semanas más tarde de aquella triste despedida la joven volvió a aparecer frente el castillo de Bram, él al verla no pudo evitar soltar una leve risita.
¿- Se ha vuelto a perder señorita?- Preguntó el de cabello grisáceo aún con aquella sonrisa en sus labios.
- Puede.- Respondió inocentemente la de cabellos rojos. Con la cabeza el hombre le indico que podía pasar y así lo hizo. Debido a las malas temperaturas Bram no le había mostrado a la mujer los jardines del castillo por lo que se lo mostró mientras Akira le contaba que había hecho aquellas dos semanas, la joven había sido realmente productiva a diferencia de Bram quién mayoritariamente había estado durmiendo.
Por razones obvias la joven tuvo que volver a casa; sin embargo, solía escribirse cartas con Bram, sus padres habían escuchado atentamente lo que ella les contaba sobre el hombre, Akira tenía edad para casarse y si no lo hacía ya no lo haría nunca o eso creían sus padres. A pesar de haber escuchado todo lo que ella decía sobre el hombre y cuanto deseaba pasar tiempo a su lado sus padres decidieron casarla con Góngora. Por lo que una noche Akira se escapó de casa, no estaba muy segura de cómo llegaría hasta el castillo del vampiro sin un carruaje pero para su suerte aquello no fue necesario. Bram bajaba hacia la ciudad, necesitaba comprar ciertos materiales y de paso se encontró con la joven.
¿- Akira, eres tú?- Preguntó él bajando de su carruaje, la joven asintió.
- Bram...- Él sin pensarlo mucho la abrazó, se preguntaba que hacía ella allí aquellas horas de la noche pero no se lo preguntaría, no quería invadir su privacidad. El vampiro decidió que lo mejor sería volver a su castillo junto a la joven y así lo hicieron. A la mañana siguiente ella le contó que sus padres querían que se casara con Góngora, hombre al que ni siquiera había visto. Además a ella le gustaba Bram y a él Akira.
Nunca se casaron, pero desde entonces pasaron el resto de la vida de Akira juntos, a veces se besaban pero nunca nada más. Akira entendió porque al vampiro le gustaba tanto dormir y lo hacía bastante, pero siempre lo suficiente como para tener tiempo para pasar rato con Bram, dibujar y leer. Y es que Bram le había estado enseñando a dibujar, él era muy bueno haciéndolo, un día la pintó a ella y ella quería poder pintarlo a él, pero no le dió tiempo a terminar el retrato ya que no mucho más tarde de empezarlo enfermo y una semana después Akira falleció.
- Bram, te quiero... Vive por mí por favor.- Aquellas palabras le dolieron demasiado, él iba a decirle que la amaba pero ya era demasiado tarde, su amada había muerto tras decir aquellas últimas palabras. No quería vivir sin ella, Akira daba sentido a su existencia, pero ella se lo había pedido... Por lo que decidió pasar el resto de su inmortal vida haciendo aquello que ambos disfrutaban, durmiendo.
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One shots - Bungou Stray Dogs
FanfictionOne shots de los personajes de Bungou Stray Dogs. Se aceptan pedidos :)