Aproximadamente hace quince años conocí a Lena Rothul, en una fiesta organizada por la familia irlandesa. Lena se había consolidado como un agente del orden y se estaba posicionando como una de las mejores dentro de las diferentes organizaciones criminales, cinco años más tarde, dada su sutileza, pulcritud e inteligencia en los negocios y trabajos, fue nombrada como la nueva Adjudicadora.
El Adjudicador goza de una libertad plena en sus actos, sus castigos se dicen que son inimaginables y tiene el poder de acabar con la vida de cualquier persona sin represalia alguna. No significa que sea inmune, pero han sido pocos quienes se oponen o desafían a un Adjudicador, pues son peligrosos y sus métodos son de los mas crueles y sanguinarios. Ahora, si hablamos de ella, es un tanto diferente al resto, por así decirlo. Lena Rothul, desde antes de tomar esa posición, era característica de su forma tan fría de acabar con la vida de las personas. Es distante, calculadora y extremadamente fina en sus actos. Su voz es tan suave como la seda, su acento irlandés es tan pulcro y pulido como una fina daga de plata y su mirada es fría y analítica. Nunca levanta la voz y creo que eso es lo que la vuelve tan aterradora y temible, pues se dirige a las personas con una firmeza tan fina que hace pensar que no tienes opción a negarte.
No obstante, es una mujer que aprecia la lealtad y a diferencia de otros Adjudicadores ella no toma a cualquiera dentro de sus filas. Tanto así que su elección se basa en el estatus, linaje y poder, no en aquellos que solo están dispuestos a tomar un hueso y se centran en matar sin cuidado. Su guardia la conforman dos hombres, ambos de familias importantes, un japonés, hijo del jefe Yakuza, y un ruso de linaje antiguo que funciona más como su mano derecha. Hace todo lo que le ordena y parece ser el que se encarga de la logística. Y ¿cómo entro yo en todo esto? Bueno, hace algún tiempo terminé en un gran problema con la familia mexicana, conspiraron junto con su presidente para acabar con la vida de miles de jóvenes inocentes que marchaban por justicia. Mi trabajo era destruir los documentos que los incriminaban y acabar con la vida de miles de inocentes, ¿el problema? Es que no cumplí con el trabajo y entregué todos los expedientes a un grupo de protestantes que años más tarde liberaron la información y los videos de tortura e interrogatorios donde se ve involucrado los gobiernos y los grupos criminales en un trato por tomar mayor poder dentro del gobierno. Es la prueba más grande de como La Alta Mesa toma mayor poder a través de sus títeres. Mi acto fue catalogado como traición y acepté mi castigo con el honor de un asesino de elite, pero cuando llegó ella hasta mi puerta y la dejé pasar a mi casa, no hizo nada. Solo se sentó y me observó mientras sus dos perros guardianes la flanqueaban. Finalmente se inclinó hacía mí y con una voz tan suave como la seda me dijo; "Ahora me debes la vida y llegará el momento en que te haga pagar tu deuda". Después con un asentimiento de cabeza ordenó a que su segundo perro más fiel cortara mi brazo y lo marcara con una herida burda que era la marca de la deshonra. Nunca supe en qué momento eso pasaría, hasta ayer que recibí una llamada de su perro más fiel y me ordenó venir hasta aquí para hablar con ella.
Una reunión de agentes del orden, donde todos responden a ella y a La Alta Mesa. Sus miradas de vez en cuando se clavan en mí, pues saben quién soy y lo que hice. Su mirada estudia a cada uno de ellos y los organiza de una manera que parece irreal, se necesita de mucho control y estrategia para movilizar a tanta gente de la manera más discreta. Tal parece que un tal Hobbes ha causado problemas, es un excomulgado que se oculta tras un nombre falso y tiene los suficientes recursos para alterar el orden. Un problema que involucra a todas las familias, sus organizaciones, los gobiernos y es un embrollo que si no se trata con cuidado puede dejar al descubierto a la organización entera o crear problemas internos que destruyan todo un sistema de poder. Parece que ese tal Hobbes es un agente del caos y su trabajo es desestabilizar naciones enteras para ser destruidas con un cuidado digno de un dios. Sin saber dónde comenzó todo.
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La Adjudicadora
Fiksi PenggemarEn las sombras de Nueva York, donde el oscuro mundo del crimen se entremezcla con la opulencia, una misteriosa figura femenina lidera la Alta Mesa, un consejo de criminales intocables. Su rostro, marcado por el fuego, se oculta tras una máscara de p...