❝𝑴𝒆𝒆𝒕 𝒎𝒆 𝒂𝒕 𝑴𝒊𝒅𝒏𝒊𝒈𝒉𝒕❞
Era verlo todas las medias noches en aquel campo de lavanda, sin falta.
No decía mucho, su lobo hablaba por él.
¿Su destinado podría ser alguien de los 50's?
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27 de Junio
Jung Hoseok se encontraba gruñendo a diestra y siniestra, quería llorar y gritar. Caminaba alrededor del estanque donde su mejor amigo se veía con su alfa, sintiendo impotencia al estar ahí y no en la Iglesia donde se iba a "celebrar" la boda de Jeon Jungkook.
"No te quiero aquí, fenómeno bailarín... lárgate", fueron las palabras de la madre alfa, antes de sacar sus maletas de la casa donde se hospedaban en el pueblo.
—Trata de tranquilizarte, Hobi.— Jackson estaba sentado sobre una roca, a unos pasos de su novio. Viéndolo con preocupación en lugar de también sentirse enojado por la discriminación descarada que sufrió recientemente.— no podemos idear un plan si no controlamos nuestro enojo.
El mencionado suspiró, dándole la razón. Pero todo le parecía tan injusto que quería llorar, su pequeño Jungkookie no iba a estar nada bien.
—Lo sé.— se despeinó un poco, dándole la espalda al estanque.— pero Jungkook apenas y despertó del desmayo, va a estar asustado y triste...— sus ojos se pusieron acuosos.— cuando recuerdas la primera vida, las cosas se vuelven duras en esta.
—Tienes razón.— bajó la mirada.— mientras discutías con Jennie vi que el alfa se había metido a la habitación de Jungkook, pero cerró la puerta.
Ambos se sintieron peor, pero eran los menos indicados a intervenir. Ya les habían cerrado las puertas en la cara, incluso peleando casi los arrestan.
—Jungkookie será marcado esta noche.— sollozó, alarmado.— después de la boda se irán de luna de miel, pero ni siquiera Seokjin sabe dónde.
Jackson abrazó a su novio, intentando calmar los nervios alterados del chico, hasta que ambos sintieron una pequeña descarga.
—¿Qué mierda has dicho?.
Ambos gritaron, Hoseok dando la vuelta para ver quién les había hablado, sintiendo que los colores palidecían y el alma abandonaba su cuerpo por completo; sus piernas comenzaron a temblar.
—Tae-Taehyung...
Kim Taehyung yacía con medio cuerpo afuera del estanque, con sus ojos comenzando a cambiar de color tras escuchar aquella revelación sobre su Jungkookie. Miró que eran Hoseok y Jackson, pero los abrazos de bienvenida y sonrisas no daban lugar para ese momento.
Debía ir por SU omega ahora, no importaba qué.
—¿Dónde está?.
Ambos alfas no podían decir ni una palabra por la impresión, haciendo que la poca paciencia de Taehyung se comenzara a agotar. Por lo que, de forma un poco agresiva, se acercó hacia Hoseok y lo tomó de los hombros.
El alfa Kim comenzaba a gruñir.
—¿¡Dónde tienen a mi Omega!?.— exigió saber.
Hoseok fue el primero en reaccionar a pesar de sentirse un poco intimidado por la mirada dominante del alfa, sobretodo si esta comenzaba a cambiar a sus tonos escarlata. Se puso serio y pudo responder.
