El híbrido lo vio entre extrañado y algo asustado ante la presencia de un chico disfrazado de mago
—¿Y vos quien chota sos, maguito?— pregunto el pelinegro mientras lo seguía mirando.
Se aclaró la garganta—¡Soy Juan cubito, hechicero Supremo, amo y dueño de las realidades!—le dijo orgullosamente mientras colocaba una mano en el pecho.
Spreen bufo—¿A vos quien te conoce pibe?—se burlo mientras cruzaba sus brazos.
—¿Disculpa?—lo fulminó con la mirada. En su mente ya había matado mil veces a ese oso.—No, no, no, de verdad amigo, ¿Quien coño eres?—Le pregunto el hechicero mientras lo observaba, está vez con superioridad.
—Soy Spreen, el puto amo—rio con algo de arrogancia, causando que Juan frunciera el ceño.
—¡Maldito narcisista pendejo!—Lo miro con obvio enojo mientras lo observaba de arriba a abajo.
—Che boludito, ¿Puedes parar de insultarme?—se quejo el chico, mientras lo fulminaba con la mirada.
Definitivamente este oso le caía mal.
Al ver que era un oso no pudo evitar que le recordara a Rubi, pero al ver la actitud de este se decepcionó.
—Furro de mierd—se quejo, pero antes de hablar más imantado lo interrumpió.
—Spreen, ¿Tú también estás muerto?—le pregunto el chico mientras se acercaba a el.
—¿Spreen también está muerto?—pregunto mientras trataba de no reírse.
—Si, mira—la voz de Spreen lo volvió a interrumpir.
—¡No! ¡Estamos en un sueño!—Dijo el argento. ¿Acaso lo decía como juego o era verdad? Y si era verdad, ¿Era un drogadicto o que?
—Escuchame pendejo, estamos muertos, esto es el paraíso-¡Cabron escúchame!—se quejo mientras se escuchaba a Spreen repetir de fondo "esto es un sueño", de verdad, Spreen ya le estaba cayendo mal.
—¡Lo primero que tenemos que hacer es reconocer que estamos muertos! Estamos en- ¡Estamos en los círculos del infierno! ¿Okey?—le grito, mientras Spreen le golpeaba repetidas veces en el hombro, haciendo que Juan empezará a correr.
—La leye- ¡Yo leí la divina comedia! Se lo que va a pasar—le grito mientras los dos corrían en círculos y Spreen aun golpeándolo.
—A ver, deja de pegarme primero-a ver-deja de pegarme, deja de pegarme—huyo de el, poniéndose detrás de imantado.
—¡Juan, Juan!—le dijo imantado, tratando de decir algo, pero que obviamente no logro.
-¡Que me deje de pegar el puto oso!—grito mientras trataba de subirse a la fuente, cosa que obviamente no logro.
—¡Defiéndeme!—le grito a imantado mientras volvia a colocarse detrás de el.
—¡Defiendete tu solito pisha, que eres tonto—le grito mientras le daba paso al argentino.—¡Te juro que te voy a comenzar a pegar a ti también!
Y dicho y hecho, entre los dos le estaban pegando "amigablemente"
—Porfavor paren—dijo entre llorando y riendo.
—¡Auch!— paro de correr mientras se sobaba la zona donde antes el pelinegro había golpeado, casi cayéndose.
Spreen y imantado se detuvieron y dejaron de golpear al Hechicero.
—¿Me pueden parar de golpear porfa-¡Gracias!— siguió sobando la parte golpeada, mientras se sentaba en la banca.
Spreen se detuvo frente a Juan mientras se notaba pensativo, no sabía si estaba averiguando las mil maneras de matarlo, le parecía un criminal.
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┌ミ¿𝙌𝘶𝘦́ 𝙩𝘢𝘭 𝙪𝘯𝘢 𝙖𝘱𝘶𝘦𝘴𝘵𝘢?━𝙎𝘱𝘳𝙪𝘢𝘯
RomanceSipnosis: Juan, un Hechicero algo arrogante siente admiración por Spreen, quien de un momento a otro al parecer lo odia, es un arrogante narcisista a la vista del castaño. No quiere arriesgar su dignidad tan fácilmente, ¿Qué tal una apuesta? Por si...