Cellbit no podía enfrentar a Roier aun, primero tendría que ir hacia las coordenadas que Spreen le había dejado, esperaba que valiera la pena por haberlo besado enfrente de su esposo.
Mientras cuidaba a su hijo comprobó que las coordenadas marcaban exactamente a la tumba de Ramón.
El alfa sabía que la Federación tenia ojos por todos lados, pero respetaban las tumbas y las casas de cada quien, bueno la mayoría del tiempo. Así que si Spreen había dejado algo lo pondría en el lugar más seguro que tendría fuera de los ojos de la Federación.
Richarlyson fue el primero en bajar y después su padre, mientras el niño dejaba nuevas flores a su hermano, Cellbit buscaba algún lugar donde se podría haber escondido algo que no estuviera a simple vista.
Hasta que detrás de la cama había un lugar hueco tapado por enredaderas que adornaban la cama.
Saco una mochila la cual reviso de inmediato percatándose que estaba lleno de libros.
Tomo el primero que vio empezando a leer pasando de manera rápida las hojas.
— Eres un estúpido Spreen, yo era el que se iba a arriesgar —
De regreso Cellbit dejo a su hijo con Forever y el regreso al castillo solo, donde Roier se encontraba esperándolo en su habitación.
El alfa al verlo le dijo.
— Necesitamos hablar —
— Te juro que si otra vez intentas manipularme yo- —
— No! no es eso, soy malísimo haciendo eso y lo sabes —
— Entonces tú me has estado engañando con ese estúpido oso. Como paso!? Ustedes no pueden estar solos en una habitación porque se terminarían peleando. A Spreen no le caes del todo bien apenas te soporta y nisiquiera se porque —
— No, créeme, jamás me atrevería a engañarte me costó mucho tenerte para hacer algo como eso. Yo también me pregunto porque no le agrado tanto. Pero necesito que me creas, que confíes en mí, que confíes en Spreen —
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Otra Oportunidad! 👨🏻🦲🐻🐲
RandomSolo un pequeño aporte Cosas que pasan por mi mente a las 3:00 a. m.