EL PRIMER AMOR DE LUCIFER

cap. 53

a medida que avanzábamos, sentía como misha apretaba mi mano, estaba asustada, estaba decepcionada, pero sabía que debía de entender que esto que le paso simplemente era parte de su humanidad, pequeños cosas como estas son las que los demonios más le envidiamos a los humanos, pero claro, ella no era un demonio y yo no era un humano, nada era nuevo.

temía siempre enfocarme en mis problemas y sin darme cuenta estar descuidando la salud emocional de misha, ella era mi fortaleza, pero yo muy en el fondo sabía que jamás podría llegar a ser la fortaleza de ella, por el simple hecho de ser un ser débil, ya que, en la búsqueda de mi felicidad, simplemente descuidaría a la persona que más amaba y sin darme cuenta, ella se estaba hundiendo en sus miedos e inseguridades. . .

- adelante.- dijo el doctor sacando de mis pensamientos de forma bruta.- tomen asiento.- dijo el médico, misha me miro con algo de duda, yo por mi parte hice lo que el medico nos indico, por lo que misha simplemente me siguió.

- deberías de decirle al doctor que es lo que te pasa.-me di cuenta que misha estaba ahí a observando todo a su alrededor.

-lo siento, es soló qué, tengo algo de tiempo sin venir a atenderme.- misha se notaba insegura, pero ella era muy valiente.

- lo se, misha, pero es normal enfermarnos a veces, no somos súper héroes, somos humanos.- el medico era sin duda alguna un gran hombre, él era el que se hacía cargo de mi embarazo, por lo que tanto misha, como yo, estábamos familiarizados con él.- ahora dime, ¿Qué es lo sientes?

- hoy salimos de compras, llegamos a comer a un lugar de hamburguesas, pedí una y la comí, luego de eso estuvimos caminando un poco y mi estomago me empezó a doler, luego senti la necesidad de ir al baño, por lo que no tuve más opción que correr.- en el rostro de misha se notaba un leve sonrojo, mientras que el doctor solo escribía en el computador.

- ya veo, ¿no tienes algún otro síntoma?

- no, solo es eso.- misha parecía que estaba un poco más relajada, eso por alguna extraña razón me hizo sentir un poco más tranquilo.

- bueno, parece ser que la hamburguesa simplemente te cayó mal, te daré unas pastillas para aliviar el malestar, pero si este persiste lo mejor es que vuelvas aqui para hacerte unos cuantos exámenes.- el medico nos dio la receta y misha fue la primera en salir del consultorio, por lo que el medico me dio las indicaciones a mí.- ¿Cómo vas con tu embarazo?

- parece ir bien, bebé solo en ocasiones se pone algo malvado y hace que me den náuseas.- toque un poco mi barriga, simplemente por inercia.

- entiendo, por favor has que misha se tome esto, y si se siente más mal no dudes en traerla, ya puedes retirarte.

salí del consultorio, y camine rumbo a la farmacia, mis ojos instintivamente buscaban a misha, grande fue mi sorpresa al verla hablando con una anciana que parecía estar esperando a alguien, no le tome mucha importancia, hasta que senti como unos brazos rodearon mi cintura, eso hizo que un ligero sonrojo se presentara, ya que la señorita de la enfermería esta espetando todo.

- estoy triste.- me dijo misha con una voz un poco quebrada, casi tirando a llorar.

- ¿por qué? ¿ocurrió algo? ¿te sientes mal?- senti como una corriente fría recorrió todo mi cuerpo, allí estaba un anciano observándonos de lejos, sabía que él ya no se encontraba en el plano terrenal, era una pena.

- la anciana me conto que su esposo acaba de fallecer, era un viejo beta con el que había pasado la mayor parte de su vida.- misha empezó a sollozar, por lo que me di la vuelta y la abracé.- ella se quedara sola admón, no tiene a nadie que la cuide, su esposo era lo único que ella tenía.

- amor, tienes que recordar que parte de la vida la muerte es, por lo que todos debemos estar preparados para lo que pase, esa anciana no estará sola, estoy seguro que su esposo la esperara para que puedan irse juntos.- sobe su espalda para darle a entender que todo iba a estar bien.

- lo sé, es solo que me dio pensar,¿que voy a hacer cuando tu te vayas o que vas a hacer tu cuando yo me vaya?- sin duda alguna tenia a la mejor mujer del mundo.

- vivir amor mío, no por ti o por mí, si no, por el bebé que hicimos con tanto amor, él no debe de quedarse sólo.- el amor, el amor era lo que jamás separaba a las personas que se aman.