cap. 43

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salimos del medico rumbo a nuestro hogar, bebé realmente nos había dado el susto de nuestras vidas, pero al menos ya sabíamos que todo estaba bien, esta noche dormiríamos muy tranquilos.

misha llego a casa hecha un desastre, solo sollozaba en silencio, pero no decía nada, asi que decidí acercarme a ella y abrazarla, esto con la finalidad de hacerla sentir tranquila.

- tenia miedo mi corazón, realmente temí por la vida de nuestro hijo.- misha rompió el llanto en mis hombros.

- lo se querida, yo tambien estaba muy asustado, pero nuestro bebé es realmente muy fuerte.- intentaba consolarla, pero sabia que iba a estar asi por algunos días.

- es solo que... se que aun no lo conoces, pero siento que bebé y tu son lo más importante de toda mi vida, daría mi vida por ustedes.- misha secaba sus lagrimas con la manga de mi camisa, sabia que ya estaba un poco más tranquila.

- y tu lo eres para nosotros amor mío, realmente eres muy importante, te amaré toda está vida, a veces creo que a la vida le debería de dar vergüenza porque mi amor por ti es más duradero que la vida misma.- sobe un poco la espalda de mi amada, ella simplemente se separo de mi son dejar de observarme.

- soy demasiado afortunada, realmente muy afortunada.- misha me miro con los ojos más lindos del mundo, sin duda alguna expresaban todo su amor hacia nosotros, era ese amor que no necesitaba de palabras.

- es hora de dormir, mañana será otro día.- le dije para tomar su mano y guiarla hacia nuestra habitación, ella ya no dijo palabra alguna, simplemente me siguió en silencio.

esa noche nos fuimos a descansar luego de tremendo susto que nos metió nuestro bebé...pasadas las 3:30 am pude sentir como entre sueños alguien nos observaba desde la oscuridad de la habitación, cuando al fin pude abrir mis ojos me lleve una desagradable sorpresa.

- ¿Qué haces aqui, lucifer?- sabia que no venia por nada nuevo, él era la ultima cosa que queria ver.

- solo vine a ver como estabas.- se notaba algo extraño.

- salgamos de aqui, no quiero que misha se de cuenta de que estas aqui.- lo guie fuera de la habitación, lo lleve hasta el garaje donde sabia que nadie nos podría escuchar.

- quiero que vuelvas a mi lado.- parecía estar realmente decidido.- si no aceptas, entonces me veré en la obligación de llevarte arrastrando.

- pues tendrás que arrastrarme, yo no quiero volver contigo, NUNCA.- el era el culpable de que yo nunca pueda estar con mi amada.

- admón, no seas terco, se te está acabando el tiempo, debes venir conmigo si quieres salvar a esa cosa.- dice mientras en su rostro hay una mirada de asco dirigida a mi estomago.

- está cosa como tu le llamas es mi hijo, yo daré mi vida por él, asi que declinare de nuevo tu oferta.

- admón, por favor, se que me equivoque, pero ahora tu... tu no tienes tiempo.

- nunca lo tuve, acaso olvidaste que me sentenciaste el día que te fuiste, esto es tu culpa, es culpa tuya.- no pude evitar soltar mis lagrimas, realmente nunca iba a ser feliz por su culpa.

- quiero remediar mi error, yo, yo estoy dispuesto a regresarte a la tierra luego de que des a luz y tu vida ya no peligre, pero por favor, ven conmigo... toma mi mano, admón.- lucifer extendió su mano, sabia que si la tomaba jamás volvería a ver a misha.

- lo siento, no puedo hacer eso, se que está es mi ultima vida, asi que quiero vivirla como yo quiero, no como otros quieren que lo haga, daré a luz a mi hijo aqui en la tierra, se que moriré, pero al menos tendré la certeza de que mi bebé está en las manos correctas.

- eres un imbécil, realmente eres un imbécil...- parecía estar realmente frustrado, pero yo ya había tomado una importante decisión.

- nos vemos pronto, señor de las tinieblas.- sin más que decir, lo deje ahí parado en mi garaje, sabia que en algún momento se perdería entre las sombras, y asi fue, cuando volteé, él ya no estaba.

EL PRIMER AMOR DE LUCIFERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora