cap. 42

154 24 26
                                    

cuando llegamos al medico, el doctor nos estaba esperando en la puerta con un enorme número de enfermeras, sabia que algo no estaba bien, pero no queria asustarme.

estaba a punto de bajarme del auto, cuando senti como misha me levanto en el aire, yo eché un pequeño brinco de sorpresa, pero no dije nada, sabia que misha solo queria lo mejor para mi y para el bebé.

cuando llegamos a la entrada del medico, me sentaron en una silla de ruedas, y me llevaron dentro a toda velocidad, el doctor parecía algo impactado, pero yo solo podía mantener la calma, por otra parte, misha parecía estar realmente asustada, se notaba en su semblante.

- siente algún dolor señor admón?- el doctor solo hacia preguntas de rutina, dijo que era para evitar cualquier otra complicación.

- no, por el momento solo es el sangrado,  y un fuerte dolor que senti en casa.- sabia que algo no estaba bien.

- bien, le haremos un ultrasonido para ver el estado del bebé.- el medico entro al consultorio a toda velocidad, una enfermera iba detrás de él a toda velocidad.- preparen todo para el ultrasonido.

todo paso demasiado rápido, de un momento a otro ya me encontraba dentro del consultorio con un sin fin de aparatos conectados a mi cuerpo y estomago, sabia que eran para monitorear a mi bebé, por alguna extraña razón eso me hizo sentir un poco tranquilo.

- dígame, sintió algún dolor antes de venir aquí?- preguntaba una enfermera que anotaba todo lo que le decía en una hoja de papel.

- si, senti un dolor horrible en el vientre bajó, pero disminuyo gradualmente.

- como era ese dolor, ¿puede explicarlo?

- no se como explicarlo, tal vez era igual a una apuñalada, realmente no sabría como explicarlo.

- bien, empezare a realizar el ultrasonido, ¿esta listo señor admón?- dice la enfermera para encender el monitor.

- si, claro.- dije tranquilo, no sabía cómo era posible, ya que era la vida de mi bebé la estaba en riesgo.

- y usted señorita misha?

- tengo mucho miedo, tengo demasiado miedo.- misha parecía querer llorar en cualquier momento, realmente estaba preocupada por el bienestar de nuestro bebé.
- todo estará bien, no se preocupe.- dice la enfermera intentando calmar a misha.- sr. Admón, le pondré este gel en el estómago, esta algo frío.
- claro, no se preocupe.

La enfermera levantó mi camisa para después poner el frío gel en mi estómago, puso el aparato que era para ver a mi bebé y comenzó a dar círculos por mi estómago mientras veía atentamente a la pantalla.
La enfermera estaba tan sumergida en lo que estaba haciendo que no pudo notar cuando misha empezó a llorar de la mortificación, yo solo pude tomar su brazo para darle a entender que todo iba a estar bien.
La enfermera estuvo pasando el aparato por poca más de 10 minutos, cuando terminó, me pidió que arreglara mis prendas, ella llamaría al doctor en unos momentos.

Parecía eterna la espera, la enfermera se había ido hace tan solo unos 20 minutos, pero misha y yo sentimos que había sido una eternidad.
Misha estaba apunto de ir a buscar al medico, cuando este entró con un montón de papeles en sus manos.

- Por favor, tome asiento señorita misha.- dice el médico mientras se acomoda sus gafas.
- ¿cómo está el bebé? ¿Está bien? ¿Que es lo que pasa?- misha estaba realmente alterada, yo simplemente me mantenía a la espera de lo que el doctor iba a decirnos.
- señorita misha, necesita estar tranquila, según la eco grafía, su bebé se encuentra completamente sano, lo que el señor admon sintió pudo a ver sido simples cólicos gestacionales, también en ocasiones se presenta algo de sangrado durante el embarazo, pero todo está bien, su bebé es realmente muy fuerte.
- ah~ muchas gracias doctor, realmente, realmente pensé que lo perderíamos.- misha se rompió, sabia que estaba asustada, realmente nos asustaste bebé.

Muchas gracias a los 90 seguidores, realmente aprecio mucho que me sigan, ya que me hace creer que realmente les gusta mi trabajo, porque yo si me se la de chambear.

Tengo sueño, hambre, y ganas de emborracharme a lo desgraciado.

Tengo sueño, hambre, y ganas de emborracharme a lo desgraciado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
EL PRIMER AMOR DE LUCIFERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora