𝑂𝑏𝑠𝑒𝑠𝑠𝑖𝑜𝑛 (Draco Malfoy, Lorenzo Berkshire, )

𝑪𝒉𝒂𝒑𝒊𝒕𝒓𝒆 10

Narrador omnisciente

Durante el momento incomodo, nadie dijo o pronuncio sonido alguno. Los tres comenzaron a ordenar lo que se habia pedido, Harry no se habia ido debido a que no la dejaria sola y menos con el rubio. Mientras tanto Malfoy estaba tranquilo apesar de que Potter se encontraba en el mismo lugar que el, pues ese beso y haberla tomado por la cintura era lo mejor que le habia sucedido. El tiempo de tal castigo habia concluido, Artemisa salio de prisa sin mirar a ambos chicos. Draco salio detras sin darle importancia a Potter pues ese beso habia sido como una especie de droga, queria probar de nuevo sus suaves y dulces labios.

Era las vacaciones, tiempo en el que los alumnos regresan a casa a festejar navidad. Los padres de Artemisa le habian dicho que la esperaban y que habria una cena de familiar de todos los Quinn. Ella evidentemente no se llevaba bien con ellos, incluso tenia unas primas que siempre le presumian todo. Estaba en la sala comun terminando de bajar sus maletas cuando Enzo se acerco a ayudarle, ella con una sonrisa le agradecio.

-Hola hermosa, ¿Ya es hora de irnos?.- pregunto Enzo mientras tomaba una de sus maletas para cargala

-¿Que cosa?, pero te aviso que mis padres son Muggles.- contesto Artemisa

-Y yo no tengo problema alguno, mis padres no estaran en casa por lo que no hay problema.- agrego feliz

-Bueno, vamonos.- Artemisa sabia que sus primas odiosas estarian ahi, por lo que estar con Enzo no tendria que convivir con ellas.

A los ojos de todos eran novios ya, pero los gemelos estaban todo el tiempo diciendo que no solo para que se la pasaran agrediendo como la ultima vez. Draco no habia visto a Artemisa porque su padre habia ido personalmente por el, no era libre cuando el estaba. Por lo que no se entero que Artemisa no iria sola a casa.

El camino en el tren de Hogwarts fue demasiado tranquilo, pues se la pasaron hablando de cualquier cosa y Enzo en repentinas ocasiones acariciaba su mano, sonrojandola demasiado. El solo sonreia y no dejaba de mirarla. Al llegar a la estacion, salieron para buscar transporte o eso es lo que tenia pensado Artemisa. Hasta que vio a un chofer con una cartel diciendo "Berkshire" Enzo tomo las maletas de ambos y fue a donde estaba el chofer con el auto lujuso, sorprendida al ver dicha escena se habia dado cuenta que Enzo no era nada humilde como lo decia en el tren.

-Hermosa, ven sube.- agrego Enzo al verla parada sin moverse

Se acerco al auto, Enzo abrio su puerta y espero que entrara para luego cerrarla. Ella dio indicaciones para llegar a su casa, al llegar sus padres estaban esperandola hasta que sus papas se dieron cuenta que en ese auto tan caro venia su hija, ambos padres confundidos se acercaron a este dudando de que su hija viniera en el. Solo para encontrarse con Enzo salir de el, ayudando a su hija salir de auto, ambos padres se sorprendieron de dicha situacion dandose cuenta que su hija habia enamorado a un chico de alta sociedad. Enzo formalmente se presento, sacando un ramo de rosas para la madre. Arte se dio cuenta que habia hecho magia en ese momento y sonrio de lado. Solo un genio puede amar a esta mujer, penso su madre al mirar al chico tan apuesto que su hija habia traido a casa. Los Quinn les pidieron que fueron por algunas compras, no dejarian que se quedasen en casa y menos despues de ver como Enzo miraba a su hija. Enzo agrego que el auto se habia ido y que lo llamaria de nuevo, Arte solo sonrio y lo miro.

-Iremos en mi motocicleta.- respondio mientras subia feliz por la ropa que usaba en ella.

-Te deseamos suerte Enzo, moriras ahi arriba.- agrego su madre mientras reia

Enzo extrañado la espero abajo de las escaleras para quedarse embobado pues se habia puesto su chamarra de cuero negra, unos jeans ajustados negros y botas. El solo la miro y sonrio porque se le veia demasiado emocionada. Al salir de la casa se dio cuenta de la cosa que lo mataria pues jamas habia estado en donde los muggles vivian y menos sabia de la existencia de las motocicletas. Se subio con precaucion, lo sereno se apodero de el cuando vio que si bajaba los pies podia detenerla pero esa tranquilidad se fue cuando vio que los pies de ella nho llegaban al piso y opto por bajar los pies cada que ella se detiene.

Al inicio estaba un poco paralizado, por otro lado estaba mas enamorado de ella pues parecia ser una delicada pero al darse cuenta que hacia cosas que otra chica no haria por ser demasiado delicadas. Amo esa parte de ella, al llegar al supermecado el parecia un turista mirando todo, la combinacion de un niño pequeño tambien hacia que ella lo mirara a cada rato. A lo lejos vio que habia pista de hielo y lo llevo porque sabia que le gustaria, due donde se dio cuenta de que las chicas no dejaban de mirarlo desde que habia salido de la estacion, el por otro lado solo la miraba a ella con esos ojos brillantes que se iluminaban cada vez que ella estaba cerca.

Fueros por unos patines para ingresar a la pista, el sabia andar muy bien pero ella se resbalaba mucho por lo que el aprovecho la oportunidad y la agarro fuerte de la mano y metiendola a su abrigo. Solo consiguio que ella sonriera de lo sonrojada que estaba, en un pequeño descuido ella cayo llevandoselo encima, a lo cual ambos se dejaron llegar por el momento despues de reir, se dieron un beso tierno que duro bastante. Al terminar, Enzo se levanto para ayudarla.

-¿Estas bien, hermosa?.- pregunto sonriente Enzo

-Si. gracias.- contesto un poco perdida por lo que habia sucedido

-Bueno debemos comprar las cosas para la cena.- dijo mientras le quitaba los patines

Unas chicas ni por ella se detuvieron y se acercaron a preguntarle cosas, Artemisa estaba dejando los patines mientras Enzo estaba esperandola.

-Hola, ¿Como estas?.-

-Eres de aqui no te habiamos visto.-

-¿Cual es tu numero?.-

-Disculpen señoritas, vengo con mi novia.- contesto Enzo mientras se acercaba a Artemisa