Apocalíptico (Apocalipsis zombie)

64-. Hermanos

Capítulo corto pero en lo personal, muy profundo y triste.🦇

Espero lo disfruten.

Pov. Dick:

Fue solo un parpadeo; en el momento en que abrí mis ojos, vi el cuerpo de esa chica partido por la mitad y mis propias manos separando los órganos para degustarlos.

En un punto de la atrocidad, consumido por el pánico, había llegado hasta el puerto de Gotham, casi a las afueras de la ciudad con tal de aislarme de aquella pesadilla viviente. No tenía muchos recuerdos de cómo llegué hasta aquí, pero era mejor que estar en ese departamento.

Camine sin rumbo por un largo tiempo, lo único que quería era sacar de mi mente todas esas imágenes de Amy. Todo lo que me acompañaba era la sudadera gastada de Damian enrollada en mi cintura.

Llegué a toparme con varias hordas en el camino y me pareció escuchar gritos de civiles pero estaba desconectado de la realidad hasta que me encontré frente a una casa, seguro deshabitada, estaba por seguir, dispuesto a dejarla atrás pero un olor familiar inundó mi nariz, (no se trataba de la característica fragancia de Jazmín en la sudadera, esta era diferente) no sabría describirla pero sin duda lo conocía, así que di la vuelta sin pensarlo mucho y entré a la casa.

El olor se intensificó, a tal punto de que pude distinguir un toque de café y canela.

Se formó un nudo en mi garganta y perdí la habilidad de hablar, en cuanto abrí la puerta del fondo.

Era un cuarto común y corriente, con una cama y una mesa de noche, todo era un desastre, lo usual ; solo que ese olor a cafeína se tornó agrio.

Con pasos cautelosos fui del otro lado de la cama y ahora hubiera querido no haberlo hecho, ahí yacía un cuerpo sobre una gran mancha de sangre seca.

Al hincarme junto a él y mirar más de cerca, sentí una punzada directa en mi corazón al tiempo que mi presión bajaba y las lágrimas nublaron por completo mi vista para salir una tras otra sin control.

Reconocía a la perfección esa tez pálida, esos ojos azules con ojeras muy marcadas debajo de ellos, ese cabello negro lacio, ese rostro tan angelical que siempre se la pasaba horas frente a una pantalla.

Dick: Timmy

Tomé su cuerpo tan frágil y acabado entre mis brazos y lo pegué a mi pecho para acariciar su cabello como si lo consolara, justo como en las noches de tormenta en Gotham o cuando tenía un ataque de ansiedad en la escuela o cuando recordaba la muerte de sus padres biológicos. Yo siempre estuve ahí para abrazarlo y consolarlo.

Mis dedos pasaron por ese horrible agujero que perforaba su cráneo y cerebro, ahora ya podrido.

Dick: Lo s-siento- Timmy, por f-favor perdon-name.

Lloraba, meciendo en mis brazos el cadáver de mi hermano.

Lloré por horas, lo supe en cuanto vi el sol a punto de ocultarse.

Salí de aquella casa con Tim en brazos, no quería dejarlo ahí. Sé que estaba mal, que tal vez era enfermizo pero no podría seguir sin él, no hasta al menos darle un lugar digno de descanso, la mansión.

Nuestro hogar no quedaba muy lejos de aquí, solo había que pasar la autopista central de Gótica y llegaríamos a las afueras de la ciudad, donde estaba nuestra casa.

Cuando piensas en caminar casi 20 kilómetros a pie, cargando a alguien, con la cabeza dando vueltas y por cierto, encontrando hordas de zombies a cada paso que das, suena a locura, pero para mí, suena como la única cosa con sentido en mi vida justo ahora.

Definitivamente, no pararía hasta llegar a casa.

...

Ya estábamos a los límites de la ciudad, habíamos caminado toda la noche, bueno yo lo había hecho; no bajé a Tim de mis brazos ni un segundo, en realidad no pesaba mucho, es decir siempre fue delgado y con un peo preocupante, no comía mucho pero ahora pesaba incluso menos, al estar descomponiéndose.

Justo ahora estábamos caminando entre los muertos por uno de los vecindarios que conectaban por el bosque, mi siguiente movimiento era cortar por el bosque y usar el atajo de mis hermanos para llegar a la mansión pero, en medio de mi plan algo me hizo parar. Tal vez era a causa de que no había dormido hace más de 24 horas, tal vez una alucinación o todavía seguía conmocionado al enterarme de que Tim estaba muerto, pero juraría que me pareció haber visto un rostro conocido caminar entre la horda.

Me giré en busca de aquella "persona" causante de mi distracción, hasta que vi a lo lejos una chaqueta de cuero café gastada, una que conocía bastante bien.

Con el corazón de nuevo acelerado y un nudo en la garganta, corrí hacia él, apoyando a Tim contra mi pecho en un intento por tener seguridad y confort para lo que venía.

Logré rebasar a aquella criatura que llevaba la chaqueta, entonces lo vi claramente, parado frente a mí, con sus ojos verdes ya apagados, mordidas incrustadas por su rostro y trozos de piel colgando de su mejilla, sangre seca por su cuello, la ropa desgarrada por las uñas de esos monstruos y esas botas maltrechas.

No tuve fuerza para contener las lágrimas y simplemente las deje fluir, frente a mí estaba el hombre más fuerte que había conocido en mi vida, aquel chico rebelde que siempre salía victorioso, pasara lo que pasara.

Pero finalmente, había perdido una pelea, una que le costo la vida.

Dick: Jason-

Deje escapar en un sollozo horrible que me quebranto el alma y solo vi como ese, que una vez fue mi hermano, seguía su camino con el resto de horda.