LAS FLORES QUE EL BOSQUE SE TRAGO [Omegaverse]

CAPÍTULO 12

DESAPARECE OMEGA, ANA SOREL.

La joven omega Ana Sorel fue vista por última vez por compañeros de clase el martes 16 de septiembre del 2008 a las 2:00 p.m. hora de salida de su salón de clase, luego de decirle a algunos amigos que volvería a casa, ella se marchó, abandonando las instalaciones del plantel, día y hora donde la joven seria vista por última vez.

Esa misma tarde, alrededor de las 5 p.m. los señores Sorel, madre y padre de la joven, reciben una llamada de su hija, la cual sería la última que recibirían de ella, en la cual menciona que no iría a casa esa noche ya que iría a visitar a una amiga, Martha Grill, la cual luego de aproximadamente 2 horas llama a los señores sorel para mencionarles que Ana no había llegado aún a su casa, razón por la que estaba preocupada, luego de esto tanto la familia Grill como la familia Sorel se unen en busca de la joven, despues de más de cinco horas buscando, ambas familias deciden pedir ayuda a nuestras autoridades, las cuales apenas recibieron la noticia comenzaron a trabajar en la investigación.

Así, a casi tres días enteros de su desaparición se inician las búsquedas en los alrededores del pueblo.

Mañana, Viernes 18 de septiembre se llevará a cabo una brigada de búsqueda para salir a buscar a la omega Ana Sorel de 16 años de edad a los bosques que rodean nuestro pequeño pueblo.

Si está interesado en participar en esta exhaustiva búsqueda para traer a Ana a salvo a casa, lo esperamos junto con las autoridades del pueblo en la plaza principal a las 8.00 a.m.

Esa fue la noticia que tanto su abuela como Alai escucharon mientras cenaban, un rato después, su abuela recibió una llamada de parte del consejo donde confirmaban tal evento.

Alai entro al auto para luego recargarse en él con fastidio, hacia frio, el celo aún no había terminado y le dolía la cabeza, desgraciadamente sentía la gran responsabilidad de asistir a esa brigada sí o sí.

—Alai, cariño. —Su abuela lo miro con seriedad mientras abrochaba su cinturón. —Si todavía te sientes mal no tienes que asistir, ¿lo sabes verdad?

Alai miro a su abuela y sonrío levemente, la vieja mujer tenía un rostro preocupado y cansado, lo más seguro es que su cabeza era un caos, su nieto estaba pasando un mal rato gracias a su celo y una omega del pueblo acababa de desaparecer, ella formaba parte del consejo, por lo que, por más que quisiera alejarse de este problema, su responsabilidad era estar presente en una situación tan grave como lo era la desaparición de Ana.

—Estoy bien abuela, ya te lo dije, en serio. —Respondió él con una sonrisa a la vez que tomaba la vieja mano de su abuela.

Ella dio un largo suspiro. —Okey, pero prométeme que si te llegas a sentir mal me lo dirás, ¿sí?

Alai sonrió y asintió.

Según el tipo de la radio, la brigada terminaría por la tarde, por lo que lo más seguro era que no volvieran a casa hasta en la noche, en pocas palabras, la brigada comenzaría a las ocho de la mañana y terminaría a las seis de la tarde.

Esto se repetiría todos los días hasta encontrar a Ana o algo de relevancia que ayudara a descubrir su paradero.

Por supuesto que era opcional, nadie estaba siendo obligado a participar.

Luego de veinte minutos, su auto por fin llego al pequeño edificio de la última vez. A diferencia de la vez anterior, había gran movimiento tanto adentro como afuera.

Su abuela suspiro cansada mientras apagaba el auto. —No es necesario que entres conmigo, si quieres puedes esperarme en la plaza, no está muy lejos de aquí.