Capítulo 13

11.9K 782 287
                                    

Patrick.

Aleksandra Death en su máximo punto de ebriedad, era un caso completamente serio.

Y el hecho de que haya decidido venir específicamente a mi club, hacía que las cosas se pusieran un poco más interesantes, porque estaba seguro que no tenía ni idea de que el nombre de este lugar era honor a su dueño.

Nada más, ni nada menos que el mismísimo Diablo.

Veo como sus ojos negros se encuentran completamente dilatados por el exceso de alcohol, pero sabía que no estaba lo completamente ebria para hacer el reconocimiento de mi rostro, lo sabía por la forma en que su piel, había adquirido un tono más pálido que cuando se encontraba bailando en la pista sin inhibición alguna.

Entonces, cuando creo que no puede sorprenderme más, se comienza a reír a carcajadas en mi rostro mientras que niega con su cabeza y mis cejas, se arquean con evidente sorpresa ante su risa que en vez de ser escandalosa, era armoniosa en todos los sentidos de la palabra.

—¡Rayos!— exclama entre risas—. ¡Creo que ahora sí estoy completamente ebria!— su dedo índice me señala, aún con la sonrisa estúpida que tiene en los labios por el alcohol—. Hasta alucino que el asno satírico, arrogante, pedante pero guapo como el Diablo, se encuentra a mi frente— vuelve a reírse—. Menuda locura, ¿no crees? Te pareces mucho a él...— frunzo las cejas, cuando su dedo comienza a picarme la mejilla—. Que raro...incluso te sientes como él, lo cuál es extraño, mi jefe obtuso no sería tan obtusamente ridículo para venir a buscarme sólo porque interrumpí sus sueños satíricos a mitad de la noche.

Sútil manera de llamarme estúpido, Aleksandra Death; pienso con cierta ironía.

Aleksandra se encoge en hombros, antes de murmurar algunas palabras en ruso y me sorprende un poco que aún con su estado de ebriedad, sea capaz de pronunciarlas de forma tan fluida.

No le importo tanto, para que haga algo tan obtuso...— ladea su cabeza, arrastrando de nueva cuenta las palabras, pero esta vez con ese carismático acento británico que tiene—. Así que copia barata de mi Diablo, suéltame que tengo asuntos pendientes que debo arreglar con mi botella de tequila.

Intenta soltarse de mi agarre en su cintura, pero no se lo permito al pegarla más a mi cuerpo y veo como sus cejas se fruncen ante mi acción antes de que comience a removerse contra mí, despertando más a mi verga de lo que ya estaba cuando la vi bailar de esa forma tan sensual.

Esas malditas piernas van a ser mi completa perdición.

El pequeño angelito borracho descarado está a punto de replicar, pero antes de que lo haga, tomo su cabello en un pequeño puño en mi mano, manteniendo su cabeza en su lugar e inclino mi boca hacia su oído, murmurando un par de palabras en ruso que necesito que ella solamente escuche.

Lo que no te saldrá barato, va a ser el pequeño castigo que te daré a como no dejes de moverte de esa manera contra a mí, angelito— gruño en tono ronco, delatando el efecto que tiene sobre mí, pero me importaba una mierda a estas alturas—. Así que, piensa bien lo que harás a continuación, Aleksandra, porque las consecuencias, no van a ser bonitas por el chistecito de esta noche, cariño.

Sin embargo, en vez de asustarse, suelta un jadeo completamente impresionado por mis palabras llenas de una amenaza sucia e implícita, antes de que se pegue más a mi cuerpo, rozando de forma intencionada su cuerpo contra el mío y una sonrisa, comienza a filtrarse en sus labios.

Mi mente se queda en blanco un momento, sin saber qué hacer en cuestión, porque esperaba una respuesta opuesta de ella.

Aleksandra rodea mi cuello con uno de sus brazos, mientras que su cuerpo se arquea más al mío y su vientre, roza cada vez más mi verga endurecida en los pantalones y la sonrisa llena de satisfacción en sus labios, me dice que disfruta de todo lo que está causando, sin saber que las consecuencias que tendrá, no serán bonitas.

Diablo Ruso (HDLF #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora