Izuku El Último Gojo

una trágica despedida

Actualidad.

Habían pasado ya 17 días después del nacimiento del niño gojo, el cual en estos 17 días nezu noto que el chico dormía demasiado, más de lo normal incluso se podria decir que estaba siempre dormido, comía muy bien y no había llorado para nada en esas 2 semanas, para nezu este niño era sorprendente, no solo desprendía un aura de poder y bondad si no también algo más.

Hoy era 24 de diciembre, por supuesto hoy era navidad, un día muy importante para todos debido a que todos se encontraban en sus casas celebrando y disfrutando en especial nezu, que junto a kaina cuidaban a izuku el cual tenía un pequeño gorro rojo que lo hacía ver extremadamente tierno, mientras ellos dos preparaban todo para la cena, miraban la televisión de forma tranquila, pasaban especiales navideños y caricaturas, realmente kaina estaba bastante feliz de que la heroína nana shimura la hubiera entrenado durante estos 17 dias, la heroína había sido muy buena con ella, enseñándole técnicas de combate y como lanzar adecuadamente un puñetazo, incluso le dio un régimen de entrenamiento el cual ella siguió día tras día con la disciplina en su mente.

Mientras que nezu y kaina disfrutaban del ambiente tan acogedor que se sentía, nezu hablo mientras preparaba el chocolate caliente.

-'kaina, ¿Crees que izuku pueda hablar el próximo año'- el roedor menciono mientras miraba al pequeño izuku durmiendo.

-'¿Hm?, diría que si, el es un bebé muy tranquilo y parece que será muy inteligente, como usted director'- la aprendiz a heroína menciono.

-'je, espero que tengas razón, realmente estos 17 días han sido muy tranquilos, izuku parece ser un buen niño, tal y como hisashi era'- el roedor recordó a su 'amigo', para el director nezu hisashi fue un amigo con el cual jamás pudo hablar.

-'la señorita nana pasará navidad con su familia ¿No es así?'- menciono kaina mientras cortaba unos cuantos rábanos.

-'probablemente si, después de todo es su familia, prometió estar aquí con izuku el próximo 31'- el roedor dijo bastante tranquilo, kaina asintió y siguió preparando la comida.

-'espero que el señor Torino se la este pasando bien con recovery'- el roedor río un poco ante lo dicho por la aprendiz.

-'seguro que si, jamás pensé que Torino estaría con ella'- nezu expreso sinceramente, era verdad, jamás espero eso.

-'bueno, supongo que para el amor no hay tiempo o edad'- menciono kaina mirando de reojo al pequeño peli blanco.

-'tal vez tengas razón, hablando de amor, el pequeño izuku tendrá muchas admiradoras cuando sea mayor'- el director expreso mientras reía entre dientes.

-'¿Uh?, ¿Por qué lo dice?'- ella pregunto confundida, queriendo saber a qué se refería el director.

-'veras kaina, hisashi era muy popular con las mujeres, je, en su trabajo de oficinista hubieron varios reportes de un peli blanco corriendo para esconderse de mujeres'- nezu sonrió recordando como leyó por primera vez ese reporte que tomo de la industria donde hisashi trabajaba.

-'vaya, entonces el pequeño izuku será muy codiciado'- menciono kaina mientras sonreía con diversion mirando al niño.

-'se podría decir que es el encanto gojo, o eso creo jaja'- el director respondió mientras ambos reían.

Cuando finalmente terminaron de hacer la comida, pusieron todo en la mesa frente a una gran pantalla de plasma, el pequeño izuku fue puesto en una silla para bebés, siendo cuidado por nagant ya que el niño aún no podía sostener su cuello por si solo.

Mientras el niño se encontraba sentado, nezu escucho sirenas fuera de la casa, no quería tomarle importancia a esos asuntos, los policías trabajaban duro los días festivos ya que la mayoría del año los héroes les quitaban trabajo de encima, lo que a su vez ellos devolvían dejándoles esos días especiales con sus familias.