Anatomía del corazón.

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15 de Abril de 2022.

Entre sus paredes rojas hay un sin fin de sentires, meditaciones e ideas autónomas, más que un órgano vital pareciera un ser vivo con conciencia propia. Un parásito biologico que llevamos por dentro, no podemos darle órdenes, pero el nos domina por completo.

Compuesto por emociones más que por cualquier razonamiento, alberga recuerdos, traumas, y profundos sentimientos. No tiene lógica interna ni sentido alguno, aveces ni el mismo se entiende por ser tan confuso.

Retiene y se aferra a todo aquello que lo hace sentirse seguro, esconde sus miedos y sus penas en el egoísmo y el orgullo. Aprende a soportar enormes dolores y a encubrir sus heridas, se pierde en todo tipo de sueños que lo hagan olvidar sus pesadillas.

Con el tiempo llega a endurecerse y a desconfiar de todo lo que lo rodea, pone muros impenetrables a su alrededor, esos que llamamos mecanismo de defensa.

Nos hace sufrir hasta romper a llorar, nos llena de odio, y aveces, de la nada, nos hace amar. El mismo órgano que es señal de vida puede serlo aún más de la muerte, en sus manos estamos en un peligro inminente.

Nos somete a sus impulsos y a sus caprichos, nos hace pensar incoherencias y cometer acciones sin sentido. Tratamos de domarle, de controlarle, pero se trata del peor de los caballos salvajes.

¿Cómo entender a un ser que no habla, que tan solo siente? ¿Cómo saber curar sus heridas sin siquiera saber dónde o por qué le duele?

¿Cómo hacerlo reaccionar? ¿Y cómo hacerlo entrar en razón? Ni el más experimentado médico puede entender la anatomía del corazón.

Mary Anne. 🫀

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