-perro salchicha, gordo bachicha, toma solcito a la orilla del mar, tiene un sombrero de marinero y en vez de traje se puso collar- cantó mateo terminando de guardar la ropa
-gordo bachicha vas a quedar si no cerras el pico un rato la puta que te pario- lo cago a pedos camilo
-no me rompas las pelotas- contesto mientras seguía cantando
-si no se callan los dos, los voy a reventar contra el piso- grité desde el baño, terminando de guardar en el bolsito de mano los cepillos de dientes de mateo, camilo, el mio, las cremas, desodorantes y perfumes
-chupenme la pija los dos-
-por que no me la chupas a mi bachicha puto- le susurró camilo a mateo en un intento de que no los escuche
-si no dejan de romper las bolas me voy a quedar acá, me tienen re podrida boludos, son dos nenes- los rete sentándome en la cama agotada
Mateo empezaba con las giras, eso conllevaba que tanto camilo como yo lo acompañaramos en cada paso que daba.
El egreso había sido tranquilo, después del diploma volvimos a casa, ninguno se quería fumar a nuestros compañeros siendo mediocres o a los profesores putos tratandonos bien cuando en el año nunca fue así.
Dos meses habían pasado de esto.
Dos meses que había empezado el psicólogo también.
Las pesadillas seguían atormentandome, sin darme un respiro.
Llorar a la noche se había convertido en rutina, pensando en como estaría hoy
Todos sabíamos q no iba a estar bien de la noche a la mañana y esto llevaba un proceso bastante largo pero que podía llevarlo de a poco
-no te enojes amorcito linda- me sonrió mateo mientras se tiraba a la cama y apollaba su cabeza en mis piernas
-eso, yo se q nos queres mucho mucho- se tiró también camilo y los mire
-me tienen re podrida en serio- me reí acariciandoles el pelo
No puedo explicarles con palabras lo compañeros que son los chicos.
Creo que sin ellos no hubiera salido adelante, o bueno, dado los pocos pasos positivos que di en este tiempo.
Se habían tomado el tiempo de aprender a como sobrellevar todo lo que me estaba pasando, dejando de lado que aparte de mi, ellos también habían perdido a su bebé
Era un tema que todavía no habíamos tocado, la noche de la fiesta camilo me preguntó si de verdad quería ser mamá pero fue una charla interrumpida por el horario, ya nos teníamos que ir porque no era cosa nueva eso de que siempre llegábamos tarde a todos lados, incluido nuestro propio egreso.
Charla que no volvimos a retomar, puesto a que no sabia que responder tampoco
Primero sanar.
Luego decidir
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Hola😔😔
¿Me extrañan?
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Somos Tres. - Trueno
FanfictionMateo, Camilo y yo Camilo, yo y Mateo Amar a dos hombres ... Es posible, créanme