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Mentiría si dijera que no le dolía todo, pero Christopher y Jeongin eran el diablo en persona, ahora no sabía que pensar hasta que fue como si le cayera un balde de agua fría en el cuerpo con lo que escucho.

-Tenemos que ir a una junta de socios príncipe, así que alistate, iremos al mall a comprarte bonita ropa de noche para que nos acompañes, después de todo, eres nuestro novio- soltó Christopher de manera seca antes de sonreír con maldad a Jeongin el cual le correspondió, saliendo los dos al mismo tiempo del cuarto del menor.

Se quedó completamente estático, ahora era novio de dos hombres multimillonarios, se sentía en coma y que si se pellizcaba despertaría de esa locura, pero no, se pellizco con fuerza y vez de despertar solo se le hizo una enorme marca roja en el brazo, ahora ya no sabía que hacer, hasta que recordó lo que pasaba cuando no obedecía ahora al mayor de sus novios, Yang menor solo le regañaria de palabra, pero Christopher lo sentaria en sus piernas boca abajo, y después de bajarle la ropa interior le daría nalgadas con mucha fuerza hasta dejarlo adolorido, solo para que aprendiera la lección, y ahorita lo que menos quería era tener su trasero al rojo vivo.

Con ese pensamiento se paró de golpe de la cama directo a la ducha, teniendo dentro de esta uno de sus miles shorts cortos y una bonita blusa junto a sus tenis, todo rosita, porque así se sentía más bonito.

Una vez bañado y cambiado se arregló su cabello decorandolo con un pequeño broche del mismo color de su ropa, y haciéndose un bonito maquillaje, justo a tiempo cuando Christopher entro por la puerta sin tocar acercándose con una minúscula sonrisa a él para darle un beso en la frente.

-Ya vámonos príncipe, porque también debemos comprar trajes nuevos para Jeong y para mi- explico mientras encendía un cigarro y lo comenzaba a fumar.

Hyunjin le sonrió tomando su bonita bolsa y llevando su teléfono en mano.

Caminaron los 3 al hermoso automóvil negro subiendo a Hwang atrás y Jeongin de copiloto.

El silencio lo rompió Yang menor, para explicar ciertos puntos importantes de lo que pasaría al anochecer.

-Pon atención bebé, veníamos de vacaciones pero tristemente el trabajo nunca termina, hay un hotel 6 estrellas que te encantará, allí se hará una reunión de socios mayoritarios y accionistas principales, así que debes ser muy educado y siempre que alguien se acerque a ti solo preséntate con tu nombre y debes decir que eres nuestro novio, porque hay algunas moscas que quieren comer azúcar agena en esos lugares, ¿entiendes amor?- pregunto mirando al frente esperando una respuesta con obediencia de parte del menor.

-Si papi- se escuchó desde atrás, dejando a los mayores conformes.

Pasando el rato llegaron a una enorme y bonita plaza, en la cual se bajaron caminando hacia una tienda en la que Christopher había dicho que encontrarían los trajes perfectos para la ocasión.

Hyunjin se sorprendió, en el escaparate habia unos maniquíes blancos bastante fornidos, portando bonitos trajes a lo que se le hizo algo exitante, y raro, porque eran tan atractivos si solo eran muñecos de cerámica?

-Deja de imaginar obsenidades princesa, cuando estemos dentro disfrutaras aún más cuando me los veas a mi puestos- Christopher susurro de manera morbosa en el oído del menor causándole un escalofrío, tomando su mano y metiéndole a la tienda.

Entrando fue recibído con reverencias por parte de las empleadas, las cuales solo fueron ignoradas por los mayores, como de costumbre.

-Buenos días señores Yang, hace un momento recibimos la llamada de que venían para acá- explico amablemente una mujer que portaba el uniforme de la tienda.

DADDY ISSUES - Jeongjin  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora