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Taeyong despertó sintiendo en peso de una mano sobre su vientre, Jaehyun había dormido en el piso con la cabeza apoyada en la cama.

¿Habría estado charlando con el bebé? Fueron sus pensamientos, el carmín llegó a sus mejillas, sonrió avergonzado y comenzó a acariciar los cabellos de Jaehyun con lentitud y suavidad.

Jaehyun suspiró y despertó, encontrándose con la mirada de Taeyong, sentado en la cama.

Jaehyun comenzó a reír al darse cuenta que había dormido en el piso.

Taeyong sonrió enamorado. La risa de Jaehyun era más que preciosa.

Con pereza, Jaehyun se metió a la cama junto a Taeyong, abrazándolo.

—¿Por qué está tan pegajoso, Señor Jeong?— Preguntó Taeyong.

—¿Qué dijimos sobre eso? Dime Jaehyun.— Pidió.

—¿Cómo podría acostumbrarme? Sigue siendo mi jefe.— Se escondió en su cuello.

—No ahora.

—¿Me está despidiendo?

—No.— Lo tomó del rostro para que lo mirara. —Te estoy pidiendo que seas mi novio.— Murmuró y lo besó.

Taeyong tardó en responder, totalmente sorprendido, llevó el beso a un nivel más allá, enredando sus labios poco a poco, moviendo sus cabezas.

Con Jaehyun inclinado sobre él rodeando su cintura, Taeyong llevó sus brazos a los anchos hombros del mayor. Jaehyun se separó una vez sus labios dolieron.

—Realmente me convertiste en otro, Lee Taeyong.

—No lo convertí en otro, solo saqué una fase de usted. Sigue siendo un amargado.— Miró a otro lado frunciendo su ceño.

—¿Eso significa que aceptas?— Preguntó tomándolo del mentón, obligándolo a mirarlo.

Taeyong lo tomó de las mejillas, y lo miró. —¿Tú qué piensas?

—Oye, Taeyong, tomas confianza rápido.

—¿No es lo que me llevas pidiendo hace días?— Se sonrojó avergonzado.

Jaehyun sonrió levemente en un bufido alegre.

—No respondiste mi pregunta.

—Sí, quiero ser tu novio.

Su respuesta hizo que el corazón de Jaehyun saliera por la ventana y corriera por toda la habitación.

Bebé [Jaeyong]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora