Cartas con olor amor ♡︎𝑽𝒐𝒍𝒌𝒂𝒄𝒊𝒐 ♡︎

❥︎ 𝐂𝐚𝐩. 15 𝑁𝑜 𝑒𝑠 𝑎𝑚𝑜𝑟

Hoy era noche de salir, su novio iba a trabajar hasta las tantas de la mañana y él no se iba a quedar en casa aburrido en una cama vacía, hace rato no salía así que le apetecía beber unas copas en un buen ambiente donde hubiera más gente tal vez conocer gente random e ir a hacer alguna ilegalidad por Los Santos, no parecía mala idea sí no fuera por que V lo pudiera arrestar y lo regañaría hasta el cansancio.

Pero bueno, si lo iba a arrestar que sea con un outfit fantástico que por el mismo lo deje libre, imaginaba la escena desviandola a una erótica donde tenían su segunda vez en una de las oficinas federales con roles, una maravilla.

Acabo encontrando una camisa blanca junto a un corset con reflejos rojos, a su vez su pantalón era blanco de campana haciéndolo muy llamativo a la vista, aún más con un labial rojo pasión que le lucía espectacular por su piel caramelo, nadie se resistiría en besarlo, y por "nadie" tenia en mente a un ruso de dos metros, musculoso, con uniforme federal, y que de mera casualidad se llame Viktor Volkov.

Sin esperar mucho más, salió de su casa en su auto último modelo que recientemente se había comprado, era todo un espectáculo verlo.

Bien. Entonces... ¿A donde iría a lucirse hoy?

La ciudad de noche era otra locura total, parecía que las bestias salían de sus escondites para ir a bailar en alguna esquina, H quería encontrarse con una bestia y bailar junto a ella. Su GPS lo mando al Yellow que al parecer estaba abierto, apenas llegó sintió la música que provenía desde adentro a todo volúmen, era un ambientazo.

Estacionó su auto lo más rápido posible y al no darse cuenta chocó una moto frente a él. Bahh solo era pequeño rasguño, ese trizado en el foco ya estaba así antes.

Sin mucho remordimiento entro al local que estaba petado de gente, sus hombros se movieron solos al ritmo de la música mientras caminaba a la barra a pedir algo, sentía una que otra mirada encima de él y supuso que era por tremendo outfit que tenía.

—Dame un coctel —pidio al bartender que le sonrió con un "en camino", al lado suyo estaba un chico que parecía pasado de copas y estaba muy animado, llamándole la atención— hey, ¿está calientito el ambiente o que? —

— Ni te imaginas, loco —movía sus brazos en un intento de baile solo divertiendo al chico.

— Bah, ¡loco! —imitó divertido el apodo que uso en él— ¿estás con más gente? —entre más gente mejor para él.

— Solo otro loco —alzó su vista para ver si encontraba a su acompañante— apuesto que está ligando por ahí. —

— Tenga su coctel, caballero. —

— ¡Gracias! —le sonrió animado dándole un gran sorbo— pide una, que yo no invito, loco. —

— Jajaja me caíste bien —se levantó de donde estaba con un cubata en mano— ven, vamos a buscar al loco para divertirnos los tres. —

Entre "el loco" -que así lo había apodado por que nunca le pregunto su nombre, tal vez si aquella persona le decía su nombre y no era uno asombroso le quitaría su magia- y él buscaron a alguien que no le ponía ni cara al tener solo con algunas descripciones físicas parecía ser alguien que no estaba muy al día con la moda, así que no le sintió tanto potencial como a su nuevo mejor amigo.

— Oye, loco —llamó su atención, una vez que pasaron 15 minutos de búsqueda inservible ya estaba hasta los cojones— traigo una nave que flipass, ¿quieres ir a dar una vuelta? —

— Pero, ¿y mi amigo- —

— Tu amigo debe estar comiéndose el morro en alguna esquina, déjalo —rió caminando hacia la salida siendo seguido su acompañante.