Capítulo 4

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La imagen se aquellos ojos rojizos eran borrosos, se sentía observada y parecía estar en un lugar lleno de oscuridad. Pero Jennie no sentía miedo, solo seguía a esa mirada que rondaba a su al rededor.

De pronto leves gritos aparecieron, se escuchaba llantos suplicantes y el ruido se hacía más fuertes. Jennie vió a su al rededor, la ciudad se veía borrosa pero pudo darse cuenta de lo que pasaba. Las personas corrían de un lado a otro, estaban aterradas, la tierra se abría y en los cielos, las nubes parecían fuego.

Sus ojos se abrieron repentinamente, ella estaba jadeante, el sudor en su rostro brillaba. Se sentó de inmediato y se dió cuenta que solo había sido una pesadilla.

Pero...¿En qué momento había llegado a casa? Trató de recordar pero parecía tener un bloqueo. Suspiró y observó la hora en su celular, eran las 3:33 de la mañana.

_Debes protegerla ahora más que nada - Lisa la veía, Rosé estaba a su lado - vendrán por ella. No permitas que la toquen.

_¿Por qué lo hiciste? - Rosé preguntó - ya la tenías de regreso, ¿Por qué le hiciste dormir? No te recordará.

_Lo hará - respondió tranquila - ella no es una humana común. Sus recuerdos vendrán de a poco y podrá asimilarlo. Cuando esté lista, Lilith estará de regreso.

_¿Qué planeas hacer cuando eso suceda?

_Eso depende de ella. Si es una vida tranquila lo que busca, lo haremos. Si quiere destruir el mundo...- giró a verla, sonriendo de lado -...aquí estoy yo para cumplir su palabra.

_Más vale que no lo haga - Rosé advirtió seriamente - ¿Quieres que su alma vuela a ser encerrada? Ese lugar es insoportable hasta para un ángel, ahora que escapó, estoy segura que no quisiera volver. Su único escape fue saltar a la tierra y nacer como una humana, si vive su vida como lo sigue haciendo y se arrepiente, quizá pueda volver al cielo.

_¿Arrepentirse de qué? - Lisa preguntó con notable molestia - ¿De no ser exclava de un imbécil humano? ¿De no cumplir sus caprichos? Adán la veía como un animal más, nunca le dió el respeto que merecía.

_La guiaste por un mal camino, Lisa. Ella pudo haberse quedado en el Edén, pero preferiste lavarle la cabeza con tu odio y resentimiento.

_Ustedes, siempre le llaman odio o resentimiento a todo lo que no alabe a Dios - suspiró - pero lo que pasó ya es pasado, estamos hablando del futuro. Ten cuidado con las personas, ¿Sí?

_¿Con las personas? - Rosé no entendía.

_Procura, que sus comentarios no hagan enojar a Jennie, porque cuando llegue a su límite, será Lilith quien responda - retrocedió sonriendo - y no estoy hablando de palabras - desapareció.

Lisa le quitó los recuerdos de la biblioteca y el encuentro que tuvieron. Supo que pudo ver a los espectros y también a Rosé junto a Jisoo peleando. Lo vió todo a través de sus ojos y notó el miedo que comenzaba a dominarla al encontrarse con ella. Le alegró volver a ver a la castaña, pero aún no está lista, su cuerpo humano no resistiría el miedo, tenía que saberlo de a poco y Lisa la hizo dormir.

En la mañana, Jennie alistaba sus maletas para el viaje que haría a un pequeño pueblo. Traería mercancía de alimentos y allí los vendían muy baratos al comprarlos directamente de los proveedores.

El viaje sería de dos horas, se quedaría un día y al siguiente regresaría. Ya lo había hecho muchas veces, pero ese último año no había podido por cuidar de su madre adoptiva.

Pasaba por el pasillo del bus buscando su asiento, sonrió al ver que era al lado de un chico que parecía muy alegre. Se sentó junto a él y se saludaron. El joven era alguien muy femenino y a Jennie le agradaba su manera de hablar.

Lucifer Donde viven las historias. Descúbrelo ahora