𝐂𝐚𝐩 14

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𝐊𝐢𝐧𝐠𝐬𝐭𝐨𝐧𝐞 𝐒𝐭𝐞𝐢𝐧 𝐌𝐞𝐲𝐞𝐫

𝑹𝒆𝒄𝒖𝒆𝒓𝒅𝒂𝒎𝒆 𝒑𝒐𝒓𝒒𝒖𝒆́ 𝒕𝒆 𝒔𝒊𝒈𝒐 𝒆𝒏 𝒆𝒔𝒕𝒂𝒔 𝒄𝒐𝒔𝒂𝒔 𝒊𝒍𝒆𝒈𝒂𝒍𝒆𝒔- dice Asher mirando desde dentro del auto mirando a todos los autos estacionados.

𝑷𝒐𝒓𝒒𝒖𝒆́ 𝒆𝒓𝒆𝒔 𝒎𝒊 𝒎𝒆𝒋𝒐𝒓 𝒂𝒎𝒊𝒈𝒐 𝒚 𝒆𝒔𝒕𝒂𝒎𝒐𝒔 𝒂𝒎𝒃𝒐𝒔 𝒆𝒏 𝒍𝒂𝒔 𝒃𝒖𝒆𝒏𝒂𝒔, 𝒆𝒏 𝒍𝒂𝒔 𝒎𝒂𝒍𝒂𝒔, 𝒆𝒏 𝒍𝒂𝒔 𝒗𝒊𝒄𝒕𝒐𝒓𝒊𝒂𝒔, 𝒆𝒏 𝒍𝒂𝒔 𝒎𝒊𝒄𝒆𝒓𝒊𝒂𝒔, 𝒆𝒏 𝒍𝒂 𝒑𝒐𝒃𝒓𝒆𝒛𝒂 𝒚 𝒆𝒏 𝒍𝒂𝒔 𝒓𝒊𝒒𝒖𝒆𝒛𝒂𝒔. 𝑺𝒊 𝒚𝒐 𝒗𝒐𝒚 𝒂 𝒍𝒂 𝒄𝒂𝒓𝒄𝒆𝒍 𝒕𝒖́ 𝒕𝒆 𝒗𝒊𝒆𝒏𝒆𝒔 𝒄𝒐𝒏𝒎𝒊𝒈𝒐, 𝒚 𝒔𝒊𝒏𝒐 𝒄𝒐𝒏𝒔𝒊𝒈𝒐 𝒖𝒏𝒂 𝒎𝒖𝒋𝒆𝒓 𝒕𝒖 𝒕𝒂𝒎𝒑𝒐𝒄𝒐 𝒍𝒐 𝒉𝒂𝒓𝒂𝒔- aclaro. -𝑷𝒂𝒓𝒂 𝒆𝒔𝒐 𝒔𝒐𝒏 𝒍𝒐𝒔 𝒂𝒎𝒊𝒈𝒐𝒔, 𝒑𝒂𝒔𝒂𝒏 𝒑𝒐𝒓 𝒍𝒂𝒔 𝒎𝒊𝒔𝒎𝒂𝒔 𝒆𝒙𝒑𝒆𝒓𝒊𝒆𝒏𝒄𝒊𝒂𝒔 𝒚 𝒎𝒐𝒎𝒆𝒏𝒕𝒐𝒔.

Y pasar las mismas desgracias, no voy a sufrir solo. Para eso son los amigos.

𝑸𝒖𝒆́ 𝒄𝒍𝒂𝒔𝒆 𝒅𝒆 𝒂𝒎𝒊𝒈𝒐 𝒆𝒓𝒆𝒔, 𝒎𝒆 𝒍𝒍𝒆𝒗𝒂𝒔 𝒅𝒊𝒓𝒆𝒄𝒕𝒐 𝒂 𝒍𝒂 𝒎𝒂𝒍𝒂 𝒗𝒊𝒅𝒂 𝒚 𝒕𝒖 𝒅𝒆𝒃𝒆𝒓 𝒆𝒔 𝒍𝒍𝒆𝒗𝒂𝒓𝒎𝒆 𝒑𝒐𝒓 𝒆𝒍 𝒃𝒖𝒆𝒏 𝒄𝒂𝒎𝒊𝒏𝒐- dice

¿Qué mala vida?, ¿los autos son mala vida?. Claro que no lo es, es un deporte como cualquiera la diferencia es que es extremo. ¡¿Y por cual buen camino?!. Si vida en ganar dinero se basa en robar, matar y vender sustancias ilicitas. ¿Desde cuándo yo soy de llevar a la gente por el bien?.

𝒀𝒐 𝒏𝒐 𝒕𝒆 𝒕𝒓𝒂𝒊𝒈𝒐 𝒂 𝒏𝒂𝒅𝒂, 𝒕𝒖 𝒕𝒆 𝒊𝒏𝒗𝒊𝒕𝒂𝒔 𝒔𝒐𝒍𝒐- corrigo. -𝑨𝒅𝒆𝒎𝒂́𝒔 𝒕𝒖 𝒏𝒐 𝒄𝒐𝒓𝒓𝒆𝒔, 𝒆𝒓𝒆𝒔 𝒍𝒂 𝒑𝒐𝒓𝒓𝒊𝒔𝒕𝒂.

Por eso me lo traigo, sirve de porrista. Le faltan los pompones.

𝑻𝒆 𝒗𝒐𝒚 𝒂 𝒆𝒄𝒉𝒂𝒓 𝒑𝒐𝒓𝒓𝒂𝒔 𝒄𝒐𝒏 𝒆𝒔𝒂𝒔 𝒎𝒖𝒋𝒆𝒓𝒆𝒔 𝒅𝒆 𝒂𝒉𝒊, 𝒍𝒂𝒔 𝒅𝒆 𝒍𝒐𝒔 𝒑𝒂𝒏𝒕𝒂𝒍𝒐𝒏𝒆𝒔 𝒎𝒖𝒚 𝒄𝒐𝒓𝒕𝒐𝒔- señala el auto estacionado alfrente de nosotros con varias mujeres alrededor y todas vistiendo con pantalones muy cortos, otras tienen faldas. -¿𝑻𝒆 𝒃𝒖𝒔𝒄𝒐 𝒖𝒏𝒂 𝒎𝒊𝒆𝒏𝒕𝒓𝒂𝒔 𝒉𝒂𝒃𝒍𝒂𝒔 𝒄𝒐𝒏 𝑮𝒊𝒂𝒏?.

Las miro de nuevo es busca de cuál me llame la atención, las analizo una a una y nada. No me gustan ninguna de ellas, muy delgadas para mi gusto. Puedo seguir buscando, y sino encuentro nada....me regreso a casa. Y le voy a espantar a la que Asher consiga, que no se crea que voy escucharlo como tiene una noche divertida mientras yo estoy solo y con frío.

Ya lo dije en las buenas y en las malas, sufriremos por iguál.

Además me va a conseguir una que no me gusta y solo le haria pasar un mal rato a la mujer y a mi igual. Mejor cada uno busque la que quiera y por su lado.

Hago una mueca y niego.

𝑵𝒐, 𝒚𝒂 𝒄𝒂𝒛𝒂𝒓𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝒆𝒏 𝒖𝒏𝒐𝒔 𝒎𝒊𝒏𝒖𝒕𝒐𝒔. 𝑼𝒏𝒂 𝒒𝒖𝒆 𝒂 𝒎𝒊 𝒎𝒆 𝒂𝒕𝒓𝒂𝒊𝒈𝒂, 𝒏𝒐 𝒖𝒏𝒂 𝒒𝒖𝒆 𝒕𝒆 𝒈𝒖𝒔𝒕𝒆 𝒂 𝒕𝒊- digo

𝐋𝐨𝐬 𝐜𝐢𝐧𝐜𝐨 𝐡𝐢𝐣𝐨𝐬 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐌𝐚𝐟𝐢𝐚 𝐀𝐥𝐞𝐦𝐚𝐧𝐚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora