Pequeña Casualidad || PEDRI|| Part III.

Parte 22-Mi primer año

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NARRA ALEX

Pedro ya había cumplido casi dos añitos. Seguía siendo un bebe super tierno y agradable...se portaba genial y a penas daba guerra. Era igualito a Pepi en ese aspecto, pero se no parecía nada a Martín. Con esos dos añito de más que había cumplido, Martín era un revoltoso, siempre dando guerra y cada vez se notaba más el carácter marcado que había heredado de Gavi.

Me gustaba ser mama, y de momento no pensé en volver a trabajar para el club cogiendo una excedencia de un año para poder encargarme de mis niños y poder replantearme bien que hacer con mi vida. Quería trabajar, pero al mismo tiempo no quería volver a un lugar donde sabía que iban a estar mi padre y mi hermano, ya que mi relación con ellos seguía igual o peor que antes. Amenazas, insultos, amenazas y eso mismo una y otra vez.

Y luego estaba mi vida de casaba. Mi relación con Pedri no había cambiado mucho más después de nuestra boda. Nos queríamos tanto como el primer día o incluso más.Seguimos viviendo en la misma casa de Barcelona, cerca de Gavi para facilitar la relación con Martín, que intentábamos que cada vez pasara más tiempo con su papa, para que de un momento a otro se fuera a vivir con el y pasarle toda la tutela.

Ojalá pudiera decir que ese fue solo mi año.. pero lamentablemente no era tan perfecto como podía parecer desde fuera.

La primera mitad de ese primer año de casados todo había ido genial.. pero luego se complicó un poco cuando Pedri volvió a caer en su misma lesión de siempre al empezar la nueva temporada.

Estuvo parado sin jugar casi dos meses y cuando volvió al campo.. 4 partidos después, volvió a caer en la misma lesión después de un entreno. Pedri no estaba bien, ni física ni mentalmente y buscar a ese segundo bebe que tanto quisimos en nuestra noche de bodas no fue lo mejor. Quería encargarme por y para Pedri.. aunque a veces me lo ponía un poco complicado con sus cambios de humor y discusiones tontas que no daban para más.

La peor discusión que tuvimos fue hace casi dos meses, cuando volvió de su sesión de fisio con la pierna entumecida por completo y sin mucha sensibilidad.

Ese día se metió en su cuarto y se encerró sin querer ver a nadie, por lo que lo único que se me ocurrió fue llamar a Fer para que se quedara un rato con Pedro y yo pudiera encargarme de mi maridito, y no me lo puso nada fácil.

Al principio no me quiso ni ver, luego entre beso y beso.. la cosa se fue calentando como siempre nos pasaba, pero luego Pedri se agobió.

-Puedes hacerlo..

-Que no puedo joder Alex que no lo ves.. no siento nada de cintura para abajo- aun recuerdo como muy frustrada me senté a horcajadas sobre el.. me desnudé y lo desnudé a el y lo conduje a mi interior para que dejara de decir tonterías.

No fue nuestro mejor polvo ni mucho menos, pero sirvió para que el se desahogara..aunque yo no disfruté nada.

Después de eso a penas lo hicimos de nuevo, porque su buen humor duró poco. Pedri iba del entreno a casa y de casa al entreno, ni si quiera se acercaba a mi o a Pedro y yo ya no podía más con ello. Se estaba encerrando en si mismo, había sido paciente, pero ..y.. ya no sabía que más hacer... hasta ahora.

Debido a ese maldito día.. me encontraba en una curiosa situación. Casi dos meses y medio después no había un solo día que no me despertara con nauseas.. y la comida no me sentaba tan bien como debía. Al principio pensé que era porque la situación de Pedri me generaba ansiedad, pero.. cuando los días pasaron y vi que seguía igual.. todo eso me recodaba mucho a algo que ya viví hacia un año justo.

Eran los mismos síntomas que.. cuando me quedé embarazada de Pedro.

Por lo que llamé a Auorora con la que había encontrado un muy buen apoyo todos estos meses y le pedí que me comprara un par de tests de embarazo. A mi ya se me conocía demasiado y no quería.. que la prensa me pillara y de rebote a Pedri.