Error/Tom Kaulitz

Fiesta

Estábamos todos en la sala, papá y mamá me miraban poco convencidos, llevaba más de media hora intentando convencerlos de que me dejaran ir a "mi fiesta", los chicos me habían prometido 500 dólares si iban a esa fiesta.

-Por favor mamá, es mi oportunidad de hacer más amigos-

-No lo sé Camilla, no me gustan las fiestas de noche-

-Mamá, te lo suplico, quiero hacer amigos- mi tono de voz era cada ves más suplicante, debería ser actriz, me iría muy bien.

-Cariño, deja que Camilla asista a esa fiesta, es adolescente, necesita pasar un buen rato- Genial, ya tenía a papá de mi lado, esos 500 dólares pronto serían míos.

-Es peligroso, ella aún no es mayor de edad, como regresará?- mamá seguía buscando excusas para no dejarme ir.

-Y si los chicos van conmigo?- tenia que ir al punto.

-Camilla tiene razón, los chicos pueden ir con ella, la cuidarán, y se puede regresar en coche, mis chicos son responsables, la traerán bien- mamá ya se veía un poco más convencida.

-Bien, los quiero en casa antes de las tres de la mañana, nada de presentarles a tus amigas a tus hermanos, ustedes aún son menores de edad, nada de alcohol en exceso y mucho menos drogas-

-Gracias mamá, prometo cumplir las reglas- la abrace emocionada.

-Eso espero Camilla- mamá no estaba segura de su desicion, pero ya había hablado.

-Tranquila cariño, los chicos no la  dejarán sola ni un minuto y mucho menos tomar-

Subí las escaleras tranquila, cuando entré a mi cuarto ví a Tom y Bill sentados en mi cama, claramente esperándome.

-Que te dijeron?- Bill se levantó de un salto de mi cama y me tomo de los hombros.

-Tienes hasta las tres de la mañana máximo- dije sonriendo.

-Aah!! Te amo Cami, eres la mejor- Bill saltó y se tiró a la cama girando en ella como un niño pequeño.

-Comportate Bill, pareces un perro- Tom lo golpeó en la espalda.

-Ey! Te recuerdo que es tu oportunidad para conseguir a alguien- Dijo Bill con toda la sinceridad del mundo.
No sabía desde cuándo Tom estaba soltero.

-No gracias, estoy bien así- Respondió el mientras me miraba discretamente. No podía decir mucho, pero pude sentir como el calor subía por mi cuerpo.

-Te conozco Tom, tu no puedes estar más de una semana sin sexo- Bill lo miró.

-Ya tienes a alguien?- preguntó.

-Callate Bill, quieres?- Tom lo golpeó.

-Agh Tom, ya consigue a alguien, estoy seguro de que habrá chicas hermosas en la fiesta- El calor aumento, mi mandíbula se tensaba y podía sentir un nudo en la garganta. Eran celos?

-Fuera de aquí- hablé fuerte.
Los chicos pararon de hablar y me miraron.

-Que pasa?- Pregunto Bill con preocupación.

-Tenemos que arreglarnos, es eso-
Dije un poco más tranquila.

-Tienes razón, vámonos Tom, está noche será genial!- Bill salió victoreando mientras Tom lo seguía.

-No miraré a otras chicas, linda-
Me susurró antes de salir por completo.

Aún que Tom me había dicho eso, no quería pasar desaparecida de el, tenía que ponerme algo lindo y sexi.
Busqué en mi armario y encontré un vestido rojo ajustado con un escote algo revelador y encaje en el pecho. Era perfecto, lo acompañé con unos tacones altos negros y un maquillaje algo más cargado que lo habitual.

Después de una hora tocaron mi puerta.

-Pase- dije acomodando mi pelo.

-Vamonos, ya son las 11:00- Bill no dijo más y salió de mi cuarto.

Tomé mi bolso y salí de mi habitación.
Cuando bajé ya estaban esperándome, los dos chicos me miraron sin decir nada.

-Irás con eso?- Tom me miró de arriba a bajo. Podía decir que me miraba con deseo pero a la vez disgusto.

-De que hablas Tom? Se ve increíble- Bill me sonrió.

-Como quieran, vamos en mi auto, suban- Tom salió de la casa mientras nosotros lo seguiamos.

Bill subió en el asiento del copiloto y yo me senté en la parte de atrás.

-Y en qué casa será la fiesta?- dije mientras colocaba mi cabeza entre ambos para poder mirarlos.

-Casa?- preguntó Tom. Miré a Bill confundida.

- Bueno Cami... La fiesta va a ser en un antro- Dijo Bill mirándome.

-Creo que se les olvida que soy menor de edad- dije cayendo de golpe en el respaldo del asiento.

-Te quedarás afuera entonces- dijo Tom.
Lo golpee en el hombro.

-Tengo entendido que Georg es amigo del dueño del antro-

-Es amigo del hijo del dueño del antro, pero ya conoce a todos los que trabajan ahí, Bill-

-Entonces si la dejarán entrar- me miró.

Después de media hora y de haber salido de la ciudad, llegamos al antro.
Afuera ya estaban Georg y Gustav esperando a que llegáramos, cuando vieron llegar el auto de Tom, se separaron del suyo y saludaron. Bajamos los tres y caminamos hacia la entrada.

-Cami ya puede entrar?- preguntó Gustav mirando la seguridad con la que avanzaba junto a los demás.

-Bueno... Aún es menor de edad pero esperábamos que Georg se encargara de esto- Bill miró a Georg esperando respuesta, el solo lo miró para después sonreírme.

Al llegar a la entrada, el gran guardia levantó la banda para que pasáramos, pero me detuvo.

-Señorita, su identificación, por favor- extendió su mano frente a mi esperando a que se la diera. Georg se colocó entre nosotros.

-Oye Sebas, es la hermana de mis amigos y solo quieren pasar un buen rato juntos, yo me encargaré de todo lo que tenga que ver con ella- Georg palmeó el hombro del guardia y este por fin nos dejó entrar.

Apenas entré la música inundó mis oídos generandome molestia pero en poco tiempo me acostumbré. Caminamos hasta unas mesas en las que ya se encontraban algunos otros amigos de los chicos.

-Por fin llegan- dijo uno de ellos.

-Vamos, no somos tan vagos como ustedes- respondió Tom mientras tomábamos asiento.

-Pidan algo en la barra, nosotros ya ordenamos- Tom se paró y pregunto a los chicos que era lo que querían.

-Me acompañas?- preguntó.

-Claro- me levanté y lo seguí, había mucha gente, algunas bailando al ritmo de la música, otras tantas tomando y las demás haciendo desastres por lo borrachos que estaban.
Cuando llegamos a la barra Tom pidió la orden de los demás.

-Que vas a querer tú?-

-No lo sé, nunca eh tomado- dije mirando la variedad de botellas en exhibición frente mío.
Tom se quedó pensando un momento y ordenó.

-Que es eso?- pregunté por el nombre de la bebida.

-Una mezcla de vodka y algo más, es bueno si aún no sabes de alcohol-

El bartender puso un vaso con la bebida que habíamos ordenado.

-Lo tomo?- pregunté sujetando el vaso.

-Me parece que para eso es, pero no estoy seguro- respondió Tom sarcásticamente. Solté una risa falsa ante su comentario y di el primer trago, sentí un ardor en mi garganta y el sabor amargo en mi boca. Estoy segura de que mi cara en ese momento fue de un disgusto enorme.

-Que tal?-

-Es lo más horrible que eh tomado- respondí dejando de lado el vaso.

-Pediré otro entonces- Tom se río y llamó al bartender.