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Era una noche fría y lluviosa.

La imagen de un auto destrozado, a punto de estallar en llamas con escombros a su alrededor. Un cielo cubierto por nubes espesas y sombrías con gotas de lluvia cayendo sobre el frío asfalto. El sonido del llanto de un niño resonando como eco entre la desolación y la pérdida. Otro auto a solo unos metros de distancia de la misma forma que el anterior. Sólo fue un momento de descuido para traer ruina y devastación.

Llora y sigue llorando, mezclándose con los poderosos relámpagos que cegaban su vista.

El lejano sonido de una ambulancia acercándose cada vez más.





La lluvia sigue golpeando implacablemente contra la ventana de aquella habitación, replicando el ritmo frenético de su corazón acelerado. El sonido del llanto del niño, volviéndose tan débil como un susurro, resonando en su mente atormentada.

La oscuridad se cernía sobre la habitación de Jeongin, envolviéndolo en una niebla densa y tenebrosa. Abrió los ojos entre la negrura y oye el sonido de gotas bruscas chocando contra su ventana. Su mente y pensamientos aún con las imágenes aterradoras de su sueño.

Sudado y tembloroso, con una sensación de peligro.

Con manos temblorosas, encendió una lámpara junto a su cama, la cual debería estar encendida, nunca la apaga. En el momento que no encendió se dio cuenta que se fue la luz. Una opresión y necesidad de luz, intensificó el vacío de su corazón siéndole difícil respirar.

Jeongin se levantó y caminó a unos gavetines rápidamente con sus manos temblorosas y el sonido de su corazón retumbando sus oídos. Sacó una lámpara portátil, linda y pequeña en forma de nube y la encendió.

Rápidamente una luz azulada brilló en el techo de su habitación, con lindas nubes blancas y puras. Luz, eso necesitaba.

Tomó una bocanada de aire sintiéndose solo un poco menos asfixiado. Volvió a la cama dejando la lámpara en la mesita de noche de al lado. Se recostó y se aferró a sus sábanas, luchando contra el remanente de la pesadilla que aún se aferraba a su ser. La tormentosa lluvia no lo ayuda a conciliar el sueño.


Tiempo después, cayó en los brazos de Morfeo.








Tiempo después, cayó en los brazos de Morfeo

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Mi Novio es el Matón de la Escuela - HyuninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora