𝐂apítulo 18

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  ◌ 💫˴  Silencio para ambos. ˚

Erick.
                    (Actualidad)

Yo mismo era consciente de que Shei no seria buena conmigo, yo mismo entendía que no me merecía eso de ella y esta en todo el derecho de tenerme ese enojo, pero la forma en la que me rechazaba ahora o hacia que las cosas no sean para Suhel, me dolían.

Cuando subí al auto solamente conduje a casa, esa misma casa donde antes Shei vivía, parecía verse que nadie la habitaba ahora pero tenía entendido que sus padres aún se quedaban en ese lugar, podía ver a Shei y a mi corriendo en su jardín cuando apenas eramos niños pero eso solo eran imágenes que se quedaban en mi mente y en la cuestión de segundos se iban, no había nada más que esa pequeña y vaga presencia de nostalgia.

Fuí a mi casa lugar donde estacione el auto y baje, sentía una gran carga en mis hombros, como si algo me hubieran puesto y eso me impedía caminar bien. La puerta se abrió y note a mi hermana, salía, cuando me miró solamente sonrió a medias y me hizo un gesto para que ahora vaya hacía ella, el silencio entre ambos se hizo presente en ese pequeño recorrido del jardín y su mirar viajaba siempre al cielo con esos colores naranja.

— Si yo fuera Shei dudaría en perdonarte, ¿sabes?

— lo se, yo ahora me doy cuenta de eso. Hoy pasé el tiempo con Suhel y le compré cosas, ella me rechazo todo y me cerró la cajuela en el rostro.

— ¿piensas ganar a Suhel y Shei con dinero?

Negué una ocasión y después de eso camine hacía la parte donde había una pequeña banca, mi hermana se sentó y yo también lo hice después de ella. Mis codos se recargaron en mis rodillas y después mire hacía ese césped.

— pensaba en hacer las cosas bien, pero yo tampoco tengo tiempo, Luai se que papá no les a hablado sobre esto porque yo se lo pedí pero tu si tienes que saberlo.

Pude notar como su rostro estaba en esa gran preocupación y como no iba a estarlo si ahora mismo le estaba dando una de las noticias importantes para mi. Sentí su mano sobre la mía apretando esa misma, sus lágrimas rodaban sobre sus mejillas hasta que ella asintió, me abrazo de la manera más cálida que pude sentir pero aún así sentía que era como si no quisiera soltarme.

— Papá y yo sabemos eso ¿cierto?

— solo los dos, al resto se lo diré después pero a quien no quiero decirle nada es a Shei. Se que no puedo dejarla nuevamente sola pero estoy cansado, cada vez me siento más débil e incluso más frustrado, por no poder ayudarme a mi mismo. Hoy iré a cenar con ellos, pero quiere decirle ya a Suhel que yo soy su padre, pensé que iba demasiado rápido ella con eso.

— Va demasiado rápido, pero a la vez la entiendo, tener que ocultar eso durante esos cinco años supongo que para ella es una carga esa mentira pero, Erick. Ahora que volviste y puedes estar con ella intenta recuperar una parte suya.

— quiero hacerlo pero ella de verdad detesta eso, apenas llevo estos días aquí y ya siento que me odia más, considerando que con ella apenas llevo un día hablando y con ustedes más.

Ella empezó a reír y yo también lo hice aunque esas risas eran bajas y apagadas. Sentí su mano en mi hombro y después esa sonrisa que era reconfortante, me levante de ese lugar y mire el reloj en mi muñeca, ya era la hora o casi esa hora.

— Me voy, no quisiera llegar tarde con ellos, te veré más tarde.

Deje un beso fugaz en su mejilla como acostumbraba a hacerlo y después de eso camine hacía el auto en el cual subí y conduje para ir a su casa, el cielo ya empezaba a cambiar sus colores y esa vista era agradable, tranquila y reconfortante.

Búscame en cada estrella.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora