𝐋𝐚 𝐕𝐮𝐞𝐥𝐭𝐚 𝐀𝐥 𝐌𝐮𝐧𝐝𝐨 || Quackity X Tú

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Era un nuevo día, la chica estaba sentada desayunando mientras miraba su celular.

Llevaba varios días sin respuesta de Fernanda, iniciaba a pensar que había perdido su amistad por completo.

Pero le había dolido el que ella la llamara de esa forma.

Estaba por darle un bocado a su comida hasta que escucho el timbre, alzó la cabeza mirando hacia la puerta.

— ¡______, abre la puerta por favor! — Alex estaba en el baño.

Bufo y se levantó con pereza, se acercó a la puerta y la abrió.

Allí estaba de nuevo, ese chico alto y de cabellos castaños.

— Oh, señorita ______ — La miro y sonrió levemente.

Ella de igual manera sonrió y lo dejo pasar.

— Hola, no esperaba verte por aquí hoy — Rio mientras volvía a sentarse dónde estaba su desayuno.

— ¿Estás desilusionada por verme aquí? — Se sentó en una silla que estaba en la mesa mientras esperaba al chico.

— No, no, por eso digo que solo no lo esperaba — Nuevamente estaba por volver a comer, pero paro y lo miro.

— ¿Ya desayunaste? ¿Quieres algo de comer? — Dijo mientras se levantaba rápido.

Ahora sentía que se vio como una mal educada frente al amigo de Alex.

— Oh no, tranquila, siéntate y desayuné usted — Nego con la cabeza y la miro con una sonrisa.

— Bueno.. pero cualquier cosa que necesites avisame — Sonrió y tomo la cuchara volviendo a comer.

— Está bien, pero no te preocupes por eso — Insistía en que se mantuviera tranquila.

— Bien, pero dime ______, no es necesario que me trates de usted — Ahora pedía tener un trato menos formal.

La había ayudado a no perder a su hijo así que no necesitaba formalidades después de todo.

— Bien, señorita ______ — Sonrió y miro su celular.

No paso mucho tiempo cuando Alex salió del baño con una toalla en su cabeza, pero ya se encontraba vestido.

— ¿Wil? ¿Qué haces aquí? — Rio levemente mientras se acercaba secando su cabello.

— Venía a visitarte pero me encontré con esta señorita hace unos días y justo fue quien abrió — Hablo refiriéndose a la chica que se encontraba desayunando.

— Ah si.. está aquí por un tiempo, pero ignorala, ella está en lo suyo — Está vez se sentó en en la silla que quedaba en el comedor.

— No deberías tratar así a un señorita embarazada — Reia un poco mientras miraba a ambos.

— Meh, un bebé no da diferencia — Se alzó de hombros mientras hacía una mueca de burla.

— El bebé es tu hijo, claro que da diferencia, tonto — Dijo levantándose llendo a lavar su plato.

— ¿Qué? — El de cabellos castaños miro a el chico que ahora se quedaba totalmente pálido.

— ¿Qué? — Ahora repetía como si no hubiera escuchado lo que dijo la chica.

— ¿El bebé es tuyo? ¡¿Vas a ser padre?! — Pregunto exaltado, jamás había pensado eso.