Un pasado, un origen

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Hürrem había llamado a Rustem Pasha para encomendarle una misión.

Rustem: Sultana Hürrem.

Hürrem: Rustem, necesito que mates a Mihrimah.

Rustem: Pero Sultana...

Hürrem: Se negó a ayudarme en matar a Mustafa. Bien, pagará las consecuencias por desobedecer.

Rustem: Pero...

Hürrem: Sé que aún la amas a pesar de que Mihrimah no te ama.
Este podría ser tu momento para vengarte.

Rustem: Sultana...

Hürrem: Rustem, yo soy su madre y sé qué es lo mejor para ella.

Rustem: No la estoy juzgando.

Hürrem: ¿No te duele el hecho que ella te ignora?
El hecho que ella te ha despreciado.
El hecho que no le importó en lo más mínimo tus sentimientos.
Y no menos importante que te uso para ser madre.
¿Nada de eso importa?

Rustem: Bien, lo haré.

Rustem regreso a su Palacio con dolor y rencor en su corazón.
Hecho una furia irrumpió en los aposentos de Mihrimah.

Mihrimah: ¿Qué te ocurrió?

Rustem: La Sultana Hürrem envía sus saludos.

Sin darle tiempo a reaccionar, Rustem agarró el cuello de la Sultana.

Rustem: ¿Por qué nunca me amaste?
¡¿Por qué?!

Mihrimah sintió una gran desesperación y miedo correr por sus venas. Sin poder hacer nada sintió como su vida se iba.

Allah si existes permíteme vivir para vengarme de quiénes me hicieron daño.

Mihrimah cerro los ojos resignada a morir, pero para su sorpresa despertó a sus aposentos.

Hürrem: Hija mía, despertaste.

Mihrimah: ¿madre?

Mihrimah miró a su madre con miedo, pero Hürrem acaricio su cabeza y miró con ternura a su hija.

Hürrem: ¿Cómo te sientes?

Mihrimah: Yo...  bien.

Hürrem: Haz dormido duramente dos días. Pensé que nunca despertarias.

Mihrimah: Madre, me dejarías sola. Necesito vestirme para salir.

Hürrem: Está bien, te espero afuera.

Hürrem se fue de los aposentos.
Mihrimah se levantó de su cama y se mojó la cara.

¿Esto es real?
Allah me dio una oportunidad.

Mihrimah revisó el calendario para saber qué día era.

Es un mes antes de la boda de Ibrahim Pasha y la Sultana Hatice.
Antes de que Rustem Pasha llegase a la capital.

Puedo usar todo lo que sé  del futuro para cambiar mi muerte.
Pero no hay ninguna persona en el Palacio que no esa leal a mi madre.

Obvio no le pediré ayuda a Mahidevran, Hatice o a Sha.
Ellas son muy impulsivas.
Ibrahim Pasha es el único que puede ayudarme.

Ha sido su enemigo desde que madre llegó al Palacio.
Es más disimulado e inteligente que las Sultanas.

Mihrimah salió de sus aposentos y paseo un rato por el jardín hasta que vio a Ibrahim Pasha junto a la Sultana Hatice.

Prepárate madre, porque está guerra acaba de empezar.

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No todo es amor [Mihrimah y Ibrahim]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora