Capítulo 09: Persona Cruel

26 0 0
                                    

HaRin abrió la puerta de su departamento con cuidado mientras sostenía la pequeña bola de pelos gris que ronroneaba gustosa dentro del bolsillo de su hoddie el cual cubría cuidadosamente con la gran bolsa que tenía enganchado en su hombro, con torpeza se quitó los zapatos en la entrada, rápidamente caminó descalza por su departamento hasta llegar a la sala, dejando la bolsa sobre la mesita de centro para para luego sentarse en el sofá y sacar al felino del bolsillo con cuidado para no lastimarlo, notando como este abría sus ojos, despertando de inmediato, por lo que finalmente logró observar con detalle los ojos del felino, notando que estos tenían una pequeña diferencia en su coloración, lo más notorio era la parte oscura del iris que envolvía la pupila en su ojo derecho, por lo que una pequeña sonrisa no tardó en formarse en sus labios.

—Supongo que no puedo cambiarte el nombre, lamento que debas llamarte Rara —Se disculpó con el pequeño animal mientras incorporaba su cuerpo, deslizando ambas manos por su cabello, levantándose del sofá para ir por un colet para el cabello y así poder atarlo antes de regresar—. Si te portas bien y eres una buena gatita entonces nos vamos a llevar muy bien.

Con una expresión tranquila se dispuso a sacar las cosas de la bolsa, tomando la pequeña bandeja para luego llenarla con arena de la bolsa que había comprado para tenerle de baño a la bola de pelos, observándola de vez en cuando mientras ordenaba sus cosas en una esquina del departamento, tomó un pequeño plato plástico de dos espacios y lo colocó cerca de la cocina para poder echar algo de comida, tomo a la pequeña felina entre sus manos y la llevó hasta este para que pudiese comer mientras ella iba a la cocina por agua, regresando rápidamente para poder llenar el espacio con agua para la gatita.

—Pórtate como una buena chica, iré a darme un baño —Anunció HaRin como si la felina pudiese entenderla o responder.

Se sentía agotada y estaba segura de que si no fuese porque su hermano la trajo hasta su edificio, probablemente apenas estaría llegando a la parada del autobús cercana a su edificio, necesitaba relajarse al menos por un momento y darse un baño antes de comer algo era lo ideal.

Luego de unos largos minutos de baño se dispuso a secar su cuerpo mientras se dirigía hacia el armario, buscando algo cómodo para colocarse, estaba atardeciendo por lo que ya no tenía pensado en salir de su hogar, por lo que terminó vistiéndose con una camiseta holgada y un pantalón de chándal, manteniendo la toalla en su cabello para que no estuviese tan húmedo al momento de secarlo, cuando por fin salió de su habitación rumbo a la sala, un desagradable aroma llegó a sus fosas nasales, provocando que la pelirroja cubriera su nariz de inmediato, frunciendo levemente su ceño mientras avanzaba hasta llegar a la sala, encontrándose con la gatita durmiendo en el sofá, sin embargo, junto a la caja de arena había una desagradable sorpresa.

—Rara, estabas a menos de diez centímetros de el lugar indicado —Se quejó ella mientras dirigía su mirada hacia la felina que dormía plácidamente, por lo que algo molesta se dispuso a cerrar sus ojos mientras trataba de mantener la calma—. YeSeul, lo haces por YeSeul...


Había sido un fin de semana demasiado agotador y la mudanza de su familia el día anterior había terminado por cansarlo más, por lo mismo había decidido faltar por ese día, había prometido quedarse en la nueva casa con ellos por unos días pues su madre se había empecinado en que podía acomodar las cosas que no se había llevado al departamento, así tendría su propio espacio allí, y vamos, su madre tenía una gran capacidad de persuadir hasta el punto de obtener lo que quería, tal vez por lo mismo su hermano menor había terminado como un gran manipulador, aunque no en el mal sentido.

Por lo mismo, esa mañana había salido más temprano de lo esperado para llegar bien a sus clases, aunque tal vez, solo tal vez, había llegado con más tiempo del necesario, por lo mismo, había decidido ir a la cafetería más cercana de a la facultad, sentía que sus ojos pesaban, por lo que quería despertar con una dosis de cafeína antes de sus clases, sin embargo, mientras caminaba de regreso por los pasillos de la facultad, cierta chica de cabello rojizo apareció en su campo visual, provocando que con nerviosismo detuviese momentáneamente sus pasos, desviando su mirada hacia atrás, antes de volver a mirar a la pelirroja que se encontraba fuera de su salón, por lo que no le quedó de otra que seguir su camino, evitando ver a la joven mientras ingresaba.

Shitshow ❛Park SeongHwa❜ #ATEEZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora