⁵Alicia y la Orden del Fénix [LRYEA]

31¬PROTECT HER

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↻Protegerla

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━━━━━━━ERA MEDIA NOCHE. LA SALA COMÚN ESTABA COMPLETAMENTE VACÍA, únicamente iluminada por el crepitante fuego y la luz de la luna atravesando la ventana. Ron Weasley estaba sentado en uno de los sofás, brazos apoyados en sus rodillas, mirando fijamente al suelo. Había sido un día... intenso. 

Aún podía oír el llanto ensordecedor de Alicia, clavado en sus tímpanos. Dudaba poder olvidarlo nunca. Hermione y él habían decidido irse a la sala común a esperar a la pareja, pero cuando vieron que la única en volver fue Alicia, supieron que la cosa había acabado mal. La rubia llegó llorando como nunca y se lanzó a los brazos de Hermione al instante. Ron, que siempre había odiado eso de consolar a los demás y demostrar afecto porque no se le daba bien, miró a su mejor amiga con dolor unos segundos antes de unirse al abrazo. 

No supo cuanto tiempo exactamente estuvo Ali llorando contra Hermione, acurrucada en el sofá, pero podrían haber sido dos horas y media perfectamente. Ron, aun bloqueado y sin saber qué hacer o decir, se mantuvo al margen, dejando que fuese Hermione la que consolara a Ali. Aunque la castaña también había comenzado a llorar en algún momento. 

Lo único que Alicia dijo fue: —Se han besado.

Hermione miró a Ron incrédula, necesitando una confirmación de que ambos habían escuchado lo mismo porque no se creía que Harry de verdad había hecho eso. Pero el pelirrojo estaba igual de sorprendido que ella, de hecho, se sentía hasta ofendido de alguna manera extraña y retorcida. 

Cuando los llantos de Alicia fueron apaciguándose poco a poco, Hermione se la llevó a la habitación. Fue la primera vez que la castaña se saltó un día de clase, y tenía claro que, por Alicia, lo haría mil veces más.  Ron pensó en ir a clases, pues él no tenían ninguna excusa para faltar, pero cuando hizo el ademán de levantarse del sofá, su cuerpo no se lo permitió. Estaba bloqueado. 

¿Qué debía hacer ahora? Tanto Harry como Alicia eran sus mejores amigos, pero era completamente consciente de que Harry había sido el que había metido la pata. Ahora entendía todas aquellas veces que Alicia se ponía del lado de Hermione cuando ella y él se pelaban, y se arrepentía enormemente por enfadarse con ella siempre. 

Así que se quedó sentado en el sofá, haciendo algunos deberes atrasados. No sabía muy bien por qué se quedaba ahí en vez de subir a su habitación, que estaba vacía. Tenía un presentimiento, su mente le pedía quedarse ahí. Y así lo hizo. Hasta que dieron las doce de la noche. 

La primera vez que Ron levantó los ojos del suelo fue cuando oyó el retrato abrirse. Vio a Harry entrar y ambos hicieron contacto visual durante varios segundos, sin moverse de sus sitios, hasta que el azabache dio un par de pasos en su dirección, en silencio. Ron solo se limitó a miraron seriamente, bastante decepcionado, y Harry no pudo evitar sentirse peor pues nunca había visto esa mirada en Ron. Sacó algo del bolsillo de su pantalón: era el anillo de tulipán de Alicia, reconoció Ron. 

—Me lo ha devuelto —fue lo primero que dijo Harry, en un hilo de voz. 

—Como debería haber hecho —contestó Ron más bruscamente de lo que pretendía. Harry tragó saliva.